Belén Rodríguez
Ciudad Real
Óscar Escoriza, de Badalona aunque residente de Albacete, se coronó este domingo en Ciudad Real como mejor cortador de jamón 2017 en Castilla-La Mancha. Se lleva 300 euros y un jamonero de alta gama para seguir practicando una profesión en auge en la comunidad.
“Cada vez es más frecuente que te contraten para un cumpleaños o evento similar. Ya no se entiende una boda en España sin un cortador de jamón”, explica el ganador, que se impuso este domingo en una final con nueve cortadores “de un nivel altísimo”, según él mismo y la organización, “por el impulso que se le está dando a la profesión en Castilla-La Mancha”.
El subcampeón ha sido Alejandro Irinea, de Toledo, y el tercer clasificado Agustín Borreguero, ninguno de Ciudad Real aunque llegó a la final el cortador de Villarrubia de los Ojos Óscar Rico.
El ganador no tiene más que elogios para el resto de concursantes, que lo mantearon al final como prueba del buen rollo que hay entre ellos.
Distribuidor comercial de una empresa de jamones de Albacete, Escoriza es también “el cortador” de esta empresa. “Este es un mundo en auge, donde cada vez hay más asociaciones, más interés y más gente. Aquí en Castilla-La Mancha tenemos una asociación con tres años que está haciendo mucho por este oficio”.
Concursar cortando jamón no es nada sencillo. “Es durísimo, cortar un jamón blanco de siete kilos y medio en dos horas, haciendo una buena presentación y sacando cuarenta platos bien ejecutados, bien hechos, con todas las lonchas del mismo tamaño, es complejo. Hay que tener una concentración muy alta y respirar al final, cuando terminas a las dos horas”.
De lo bien que lo han hecho han dado cuenta decenas de personas entre el viernes por la noche y el domingo hasta las cuatro de la tarde que han desfilado por el antiguo casino para degustar platos a 3 euros. Sólo hoy se han quedado platos de jamón loncheados sin vender.
