“Un día que iba a incorporarme a trabajar para cubrir una guardia estaban dos pacientes esperándome en la puerta del centro de salud amenazándome con que me iban a dar una paliza que no me iba a librar ni la Guardia Civil”. Así ha narrado Pedro Lozano Utrilla, médico de Atención Primaria en el Centro de Salud de Carrión de Calatrava, durante una mesa redonda que ha organizado el Colegio Oficial de Médicos de Ciudad Real, la agresión que vivió en sus propias carnes cuando iba a trabajar.
“A pesar de que dijeron que ni la Guardia Civil me iba a librar de la paliza, afortunadamente la Guardia Civil me libró de ella. Tuve la suerte de que mi coche tenía seguros antirrobo y no podían abrir la puerta, por lo que me dio tiempo a llamar al 112 para que acudieran en mi auxilio la Policía Local y la Guardia Civil”, ha continuado explicando el doctor durante la mesa redonda que el Colegio de Médicos ha organizado para evitar este tipo de agresiones.
Afortunadamente, la agresión fue verbal y no física, “pero fue horroroso, lo pasé muy mal”, ha explicado el profesional médico, quien ha indicado que estuvo de baja laboral un mes y al cabo de éste volvió a desempeñar su trabajo en el mismo centro en el que sufrió la agresión “porque no está articulado un sistema que te traslade de centro si sufres una agresión”.
Ascienden las agresiones a médicos en la provincia y en Castilla-La Mancha
El presidente del Colegio de Médicos de Ciudad Real, José Molina, en declaraciones a los medios de comunicación momentos previos del comienzo de la mesa redonda, ha lamentado que las agresiones a sanitarios en la provincia de Ciudad Real y en Castilla-La Mancha aumentan cada año. Concretamente, ha comentado que tan solo en Castilla-La Mancha, en lo que llevamos de año, se han producido 25 agresiones a médicos.
Sobre las agresiones a profesionales médicos, Molina ha indicado que estas cifras “no son reales”. “Cada año hacemos encuestas anónimas entre nuestros colegiados y estamos viendo que una cosa son las estadísticas que recogemos en el Colegio, puesto que solamente son aquellos que vienen a denunciar directamente la agresión y otra cosa son aquellos médicos que han sufrido una situación conflictiva en su consulta, que asciende a más de 50 personas en la provincia de Ciudad Real”, ha concretado.