Este viernes 16.000 trabajadores y trabajadoras de Repsol empiezan a secundar los tres días de huelga que CCOO de Industria ha convocado para los días 15, 16 y 17 de julio y si la empresa no rectifica «estos paros se intensificarán en los más de mil centros que la compañía tiene en todo el territorio español». La huelga de las personas trabajadoras de Repsol está motivada por «la negativa de esta empresa multienergética a reconocer el derecho de las personas trabajadoras para recuperar el poder adquisitivo y el mantenimiento de la actividad industrial y del empleo». La plantilla de la empresa multienergética tiene el «sueldo congelado desde el año 2019». La multinacional, a pesar de tener resultados históricos, «no está dispuesta a reconocer la garantía del poder adquisitivo».
En agosto «regresará la protesta», con paros los días 13, 14 y 15 de agosto si la compañía no entiende que «debe garantizar el mantenimiento de la actividad en todos los centros productivos, sin excepciones». CCOO desconvocará la huelga del 13, 14 y 15 de agosto si Repsol «adquiere este compromiso, si mantiene todos los puestos de trabajo que genera en España y si garantiza el incremento de los salarios de la manera correcta, en pleno repunte de la inflación».
Repsol acaba de reconocer que «su margen de refino aumentó un 242% el pasado año, y se estima que la multinacional superará en España los dos mil millones de euros en el segundo trimestre de este 2022». Por eso es «inconcebible que no accedan a las exigencias de las personas trabajadoras».
Es por esto que las plantillas de Repsol «están dispuestas a seguir luchando para defender el derecho a no perder miles de euros en un momento de incertidumbre inflacionista», en una empresa con un «margen de beneficios multimillonario». Desde CCOO de Industria se avisa tanto a Repsol, como al resto de las patronales y
empresas que «si no hay solución, el otoño será aún más conflictivo».