A Puertollano llegarán ocho de esos niños que pasarán y disfrutarán de un verano diferente alejados de los campos de refugiados. Lo cierto es que desde la crisis económica en todo el territorio nacional se ha pasado de 10.000 niños a tan solo 2.500 y en el caso de la provincia el número sigue en descenso y serán veinte menos con respecto al año anterior.
Ochenta niños repiten
El coordinador de la Federación de Asociaciones de Amigos del Pueblo Saharauis, Francisco Real, se muestra confiado en el que al final llegaremos y se atenderán a todos los niños, de los ochenta repiten la experiencia y otros cuarenta vienen por primera vez a tierras manchegas.
Una oportunidad, dijo Real, de alejarlos del calor durante los meses de julio y agosto en los que en Argelia se llega a más de cincuenta grados de temperatura, a la vez que se facilita una revisión médica gracias a la colaboración del Sescam y que sigan aprendiendo el castellano como segunda lengua en las madrazas.
María Luisa López Monroy, Coordinadora del Comité Local de Ayuda al Pueblo Saharaui de Puertollano, reconoció que los requisitos son mínimos para acoger a un niño, tan solo ponerse en contacto con ese comité y a partir de ahí se inicia toda la tramitación necesaria. López Monroy es clara, no se ponen trabas de ningún tipo y las familias pueden seguir haciendo su vida cotidiana, incluso irse vacaciones.
