La Asociación Regional de Químicos, ARQUICMA, ha ofrecido este viernes en el Museo Cristina García Rodero de Puertollano un recorrido por las ocho décadas del complejo industrial de Puertollano a través de una conferencia, impartida por Alejandro Llanos, y que ha llevado al público a conocer los orígenes de esta industria desde la pizarra bituminosa hasta el hidrógeno en la actualidad.
Alejandro Llanos ha ilustrado a los asistentes a este conferencia, enmarcada dentro de los actos que ARQUICMA organiza con motivo de la celebración de San Albeto Magno, sobre los orígenes de la industria puertollanense en la década de los años 40 con las cuencas carboníferas en esplendor, la construcción de la presa del Montoro, la puesta en valor de la pizarra bituminosa como inicio del complejo industrial o la construcción del conocido como El Poblado de Puertollano, así como la construcción de la central térmica.
Ya en la década de los 50, es la década centrada en la pizarra bituminosa, la inauguración de la central térmica en 1952 o, en este mismo año, el encendido de los hornos de pizarra como el inicio de la instalación para aprovechar este aceite obtenido a partir de la misma. En el año 1959 Franco inaugura la planta de fertilizantes.
Ya en la década de los 60, se plantea que la pizarra bituminosa no tiene futuro económico y en 1965 comienza la primera refinería, la primera planta de lubricantes, olefinas, el oleoducto desde Málaga a Puertollano y en el año 1966 la Paular, Calatrava, Alcudia y Montoro. En este mismo año Franco inaugura el complejo petroquímico.
En el año 1970 se pone en marcha la nueva planta de amoniaco y urea y es en esta década, según explica Llanos, cuando comienza todo el crecimiento del complejo petroquímico y se pone en marcha la segunda refinería y la segunda planta de olefinas, así como el tratamiento de aguas residuales y una recrecida de la presa del Montoro que empieza a contar con compuertas. En esta década se realiza la fusión convirtiéndose en Enpetrol para fabricar abonos nitrogenados pasa a llamarse Enfersa.
En la década de los 80 y los 90 la gran demanda del producto petrolífero y el poco fueloil hace que se produzca una reconversión en el complejo industrial, lo que se conocen como las unidades de conversión, el FCC o el coquer. Además, Enfersa amplía su planta de amoniaco y diversifica los tipos de nitratos producidos.
En la década de los 90 se ha ido produciendo la adaptación de la refinería al siglo XXI con dos retos principales como es el incremento del índice de octanos en la gasolina y la eliminación del azufre. Esto conlleva a poner en marcha la planta de alquilación y la planta de hidrodesulfuración, construyendo también una nueva planta de hidrógeno. En 1993 Enfersa pasa a llamarse Fertiberia y a producir hidrógeno a través del gas natural.
A partir del año 2000 hasta la actualidad es la década de la empresa privada, asegura Alejandro Llanos, quien manifiesta que en el año 1997 finaliza la privatización de Repsol y se pone en marcha el oleoducto de Cartagena a Puertollano. En el año 2002 cumple el complejo industrial sus cincuenta años de vida, se instalan los monumentos industriales en la Avenida de Andalucía, el hidrógeno se hace imprescindible para la nueva planta de NHC que aprovecha aún más el fueloil, una vez que se pone en marcha en el año 2003.
La exposición de Alejandro Llanos finalizaba con un recorrido por los planes de medio ambiente más inmediatos, el reciclado de plásticos, el aprovechamiento de colchones, el polietileno de ultrapeso molecular, los combustibles renovables. Y en Fertiberia la nueva planta de hidrógeno verde junto con Iberdrola. Es la historia de la industria en la ciudad de Puertollano.
Tras esta conferencia los socios de ARQUICMA compartieron una cena de hermandad.