El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Puertollano pretende llegar a un acuerdo de cesión al Centro Nacional del Hidrógeno de algunas de las naves del Vivero de Emprendedores para el desarrollo de sus proyectos de investigación, dada la proximidad de ambas instalaciones.
La portavoz del equipo de Gobierno, Ana Carmona, aseguró que este centro se ha convertido en palanca de desarrollo económico, que “coloca a Puertollano en situación óptima para aprovechar los beneficios de los desarrollos de esta innovadora fuente de energía”.
Una solución a una situación complicada de estas naves, dijo Carmona, con el objetivo de incentivar un polo de desarrollo previsiblemente esencial para esta ciudad.
Al respecto, el Pleno ha acordado que el Ayuntamiento de Puertollano ejercite acciones legales y administrativas de desahucio administrativo de dos naves que están ocupadas por Estructuras Metálicas de Puertollano (Esmepu) y Greterika Equipamientos SL, dado que existe título legal ni contractual que lo justifique y ambas entidades se encuentran en situación de precaristas.
Estas naves fueron cedidas a nuevos emprendedores del llamado “vivero de empresas” para que pudieran comenzar con la actividad empresarial durante un periodo de tiempo determinado de tres años.
Sin respuesta a los requerimientos
En el Pleno de 29 de marzo de 2017 se acordó retomar las actuaciones para poder regular estas naves y se emplazó a elaborar un pliego de condiciones, que nunca se hizo, y en septiembre de 2019, el departamento de Patrimonio hizo un inventario del estado de estas instalaciones municipales. “Es prioridad para esta concejalía reorganizar este espacio con el fin de destinar estas naves a otras funciones y recuperar el patrimonio municipal, y poner en orden las instalaciones municipales”, señaló Carmona.
Por ello, el Ayuntamiento de Puertollano se puso en contacto con dichas empresas y se realizaron los correspondientes requerimientos, dentro del diálogo y entendimiento, pero nunca recibieron respuesta.
Tan solo una vez la empresa que ocupa una de las naves, reconoció Carmona, acudió a una reunión para comunicarles la idea de que debían abandonar “y que queríamos facilitarles e incluso acompañarlos en buscar otros posibles emplazamientos para la ubicación de sus empresas”.
En este sentido, Carmona afirmó que estamos ante un caso de ocupación de patrimonio municipal sin ningún tipo de contraprestación. “En el caso que ocurriera alguna incidencia en estas instalaciones, el responsable sería este Ayuntamiento y las consecuencias las pagarían todos los ciudadanos, y, por tanto, cuanto antes debe regularizarse esta situación”.
