El Consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Francisco Martínez, inauguraba las jornadas que Bioregio celebra en la ciudad de Puertollano en la que participan seis países (España, Finlandia, Grecia, Eslovaquia, Rumanía y Francia), en total ocho socios (el único socio español es Castilla-La Mancha). En estas jornadas se ha puesto de manifiesto que “nosotros participamos mostrando lo mejor que tenemos en economía circular, para cerrar el círculo de la economía, dar mayor vida útil a todo lo que producimos, reciclar, recuperar y garantizar un futuro sostenible a la actividad económica, y en este caso la región lo hace, por ejemplo, recuperando los bioplásticos que se utilizan para la agricultura trasnformándolos en compostaje para los mismo cultivos del año siguiente”.
En estas jornadas se presentaba el proyecto estrella de la bioeconomía en la región Clamber, “va a ser nuestro proyecto, queremos vender nuestro producto al mundo, a las empresas de todo el mundo para que cuando tengan que hacer un proceso de escalado se acuerden de Castilla-La Mancha y se acuerden de Clamber”, matizaba el Consejero.
Martínez Arroyo presumía de dos puntos, el primero de ellos de la planta Clamber, única en España y casi en Europa, una planta demostrativa para que las empresas prueben si esos productos industriales pueden ser rentables en el mercado, una planta de escalado que puede traer a empresas de biotecnología de todo el mundo. Así, recordó que en estos momentos hay dos funcionando, una para el tratamiento de residuos sólidos y otra para aprovechar el vinagre de la madera para procesos industriales, ambos proyectos suponen una inversión de 1,3 millones de euros, “pero esperamos mucho más porque esta planta se tiene que posicionar como la mejor de Europa en biorrefinería, en escalado de procesos biotecnológicos”.
Ley de Economía Circular
En segundo lugar, el Consejero de Medio Ambiente subrayaba que Castilla-La Mancha está en proceso de hacer la primera Ley de Economía Circular que ninguna comunidad autónoma posee, “estamos trabajando para consensuar un texto que, en principio, tiene que ir a Consejo de Gobierno de marzo de 2018, el objetivo es que Castilla-La Mancha al finalizar la legislatura tenga una Ley de Economía Circular”. A través de esta nueva Ley el gobierno regional pretende incorporar la posibilidad de que existan cánones ambientales para las empresas que generan residuos y fianzas para la gestión de estos residuos, además en la misma Ley se contemplará priorizar a las empresas que hacen un esfuerzo por la economía circular a la hora de las contrataciones públicas, “en Castilla-La Mancha se va a primar lo verde”.
Por su parte, la alcaldesa de Puertollano, Mayte Fernández, agradecía haber elegido Puertollano para hablar de economía circular y ver el futuro con una estrategia moderna que pasa de la sostenibilidad a la economía circular para no dejar nada sin usar y que los residuos también se utilicen como materia prima, “ver el futuro medio ambientalmente sostenible, que sea compatible el medio ambiente con la economía y en Puertollano sabemos mucho de eso con nuestra estrella, que es Clamber”