Hartikas Puertollano se reunirá en el Reloj de Flores a las 18 horas del 25 de noviembre para recordar a las víctimas de este terrorismo sistemático que es el machismo. Este año, además, y siguiendo el lema «La red feminista de Castilla-La Mancha señala a los culpables» han reseñado que estas mujeres que hoy ya no están aquí no lo hacen porque un hombre se creyó con el suficiente poder de decidir sobre el sino de sus vidas.
Desde Hartikas han recordado que el próximo 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, las feministas castellano-manchegas vuelven a las calles. Desde la red feminista regional varias asociaciones feministas se coordinan para realizar acciones en sus localidades con el fin de visibilizar algo a lo que los medios de comunicación les tienen tan acostumbradas, las vidas arrebatadas a las mujeres y todo el contexto de violencia que sufren.
Con el lema «La red feminista regional de CLM señala a los culpables.» Inician esta campaña del 25 de noviembre, evidenciando que, si hay mujeres muertas es porque los hombres las han asesinado. De la coordinación, de la sororidad, del feminismo, en definitiva, nace el manifiesto de este año, que será leído en cada localidad donde la red feminista regional tenga presencia.
En este documento, reafirman su compromiso en la lucha por la eliminación de las violencias machistas a la vez que ponen el foco en los hombres. «Necesitamos una educación con perspectiva feminista que deconstruya todos los mandatos del patriarcado que tanto daño nos hacen a unas y a otros. Las feministas castellanomanchegas lo tenemos claro: la única vía para acabar con las violencias machistas es el feminismo. Las acciones se llevarán a cabo en las calles y se pueden consultar en las redes sociales de todos los colectivos que son parte de esta campaña por el 25N. La red feminista regional de Castilla La Mancha está en continuo crecimiento y este 25N se unirá en torno a los hashtag: #HombresDecentesSedValientes #SoyFeminista25NClm».
Así, en el manifiesto de la red feminista regional 25N se señala a los culpables. Porque aceptar que la violencia contra las mujeres es una realidad no debería suponer ningún escollo en ninguna sociedad del siglo XXI. Cada día se ven en las noticias, redes sociales o prensa digital cómo el número de mujeres asesinadas por la violencia patriarcal crece y cómo se está normalizando esta realidad. «Una realidad donde las mujeres NO morimos; a las mujeres NOS MATAN. Desde el movimiento feminista, uno de nuestros objetivos principales es acabar con este terrorismo que sufrimos día a día la mitad de la población mundial», apuntan.
En España, 105 mujeres asesinadas por hombres en 2019, 88 mujeres más en 2020, 78 más en 2021 y, sin haber acabado 2022, ya contabilizamos 76 más. Sin embargo, y a pesar de estos datos, hay entornos que siguen negando la violencia de género. La realidad es tozuda: 1335 mujeres asesinadas por hombres desde 2003 (año en el que se empezaron a documentar los feminicidios en España) y que podrían estar vivas, argumentan desde Hartikas.
Así, en lo que va de año, el 016 ha recibido 78.146 llamadas, 2.318 en Castilla-La Mancha. Ha habido 87.508 denuncias por violencia de género, 3.138 en CLM. A nivel nacional, hay activados 2.980 dispositivos de seguimiento, 19.881 órdenes de alejamiento y 42.877 mujeres con protección policial por el riesgo de ser asesinadas.
Desde la Red Feminista Regional, que agrupa a colectivos y asociaciones feministas de Castilla-La Mancha, este año se han puesto como objetivo no sólo recordar a la víctimas, eso siempre, sino también poner el foco en dos puntos: el de los asesinos y el de la sociedad, que sigue viendo los feminicidios como un problema secundario.
«Por un lado, si 1335 mujeres han sido asesinadas es porque 1335 hombres las han matado. Un día, en algún momento de sus vidas, consideraron que tenían el derecho, la oportunidad, la obligación de matarlas porque pensaban que eran suyas, que se lo merecían, quizá, que se lo habían buscado y que ellos eran el brazo ejecutor de una justicia, que el sistema patriarcal, les había otorgado», afirman y continúan «por otro lado, esto es posible, porque desde las instituciones no se trabaja de una manera decidida para acabar con los feminicidios (falta de recursos, ninguneo institucional, discontinuidad de proyectos y programas, escasa formación especializada, etc.) Por si esto fuera poco, como sociedad, no aceptamos la responsabilidad que a nivel individual tenemos».
Así, el movimiento feminista lanza un mensaje claro y directo: «feminismo desde la educación para que podamos vivir en libertad y en igualdad. Así, seguiremos interpelando a las administraciones para que implanten leyes educativas con perspectiva feminista y que se lleven a cabo en los centros educativos sin ambajes. Y también seguiremos reclamando nuestro derecho a la vida, en manifestaciones y en nuestros círculos familiares, sociales, laborales».