El informe de Ecologistas en Acción Castilla-La Mancha ofrece algunos datos positivos para la ciudad de Puertollano. Así, las estaciones de la RCVAP ubicadas en el campo de fútbol y junto al túnel El Carmen solo han registrado dos episodios de alta contaminación industrial, se trata del menor número de superaciones de dicho umbral en Castilla-La Mancha durante la última década.
Además, según este informe, una cuarta parte de las estaciones que miden la superación de ozono han registrado en más de 75 días durante el 2022. Si se atendieran los criterios de la OMS, y siendo el máximo legal de superaciones admisibles 75 en tres años, gran parte de la región debería tomar medidas para reducir de forma drástica la emisión de este gas. La estación industrial de Aldea del Rey en la comarca de Puertollano ha tenido la peor situación, con 99 días de mala calidad del aire, lo que según la OMS, es el máximo para 4 años.
De manera puntual, el ozono sólo ha aumentado en las estaciones de fondo rural de Campisábalos (Guadalajara) e industriales de Aldea del Rey y Barriada 630 (Comarca de Puertollano), en los últimos dos casos posiblemente en relación a las emisiones de compuestos orgánicos volátiles del polo petroquímico de Puertollano.
Así, el cuadro general que presenta Castilla-La Mancha es el de dos zonas con una elevada contaminación: una situada al norte, caracterizada por contener una gran actividad industrial y un elevado número de kilómetros de carreteras y autovías con una gran intensidad de tráfico (y en cuyo interior existen importantes núcleos de población como Guadalajara, Toledo, Azuqueca de Henares y Talavera de la Reina), y otra al sur delimitada por el área industrial de la comarca de Puertollano. La contaminación emitida desde ambas zonas y desde la Comunidad de Madrid se extiende por el resto del territorio en la forma de ozono troposférico, afectando a lugares alejados de estos focos de emisión, como las zonas rurales del interior, especialmente a sotavento de los grandes focos emisores de los contaminantes precursores del ozono.
Como consecuencia, y pese a la significativa mejora de la calidad del aire, toda la población castellano-manchega ha respirado en 2022 un aire perjudicial para la salud, según las recomendaciones de la OMS. Las dos zonas donde en el trienio 2020-2022 se ha incumplido el objetivo legal para la protección de la salud en al menos una estación (Norte de Toledo y Comarca de Puertollano) suman 650.000 habitantes, el 32% de la población de la Comunidad, afectando la mala calidad del aire a la totalidad del territorio regional.
Por este motivo, desde Ecologistas en Acción Castilla-La Mancha solicitan a la Junta de Castilla-La Mancha un plan de mejora de la calidad del aire referido a las superaciones en la última década de los valores objetivo de ozono para la protección de la salud y/o de la vegetación en todas las zonas de la región, persistiendo en el incumplimiento de la legislación ambiental en esta materia. Tampoco se cuenta con ningún plan de acción a corto plazo para hacer frente a los episodios de ozono en la Comarca de Puertollano, recurrentes en los últimos años, por lo que recuerda que ha solicitado al Gobierno regional en cuatro ocasiones la adopción de estos planes en las zonas afectadas, sin recibir respuesta.

