Los vecinos que están afectados por el derribo del edificio de Montesa, 30 siguen en su lucha para conseguir que el Ayuntamiento de Puertollano les pague el valor catastral de sus viviendas.
Han sido varias las reuniones que estos vecinos han mantenido con la alcaldesa de Puertollano para intentar llegar a un buen final en esta situación.
Los vecinos de Montesa 30, que fueron desalojados al declararse el edificio en ruina inminente y su posterior demolición, consideran que deben recibir el mismo trato que su edificio anexo, Montesa 32, que también contó con el mismo final que el suyo y del que explican pudo ser que arrastrara a sus viviendas a ese mismo estado.
Las reuniones entre estos afectados se retomarán a principios del mes de marzo para presentar una propuesta de venta al Ayuntamiento de Puertollano y ver qué decisión van a tomar sobre este asunto, a su vez, la administración local deberá presentar también su propia propuesta que podría estar por debajo de ese valor catastral que los vecinos demandan.
En cualquier caso, uno de estos vecinos aseguraba que “solo buscamos la igualdad con los otros vecinos que recibieron el valor catastral de sus viviendas, no estamos pidiendo más”. En cualquier caso este asunto todavía está por resolver una vez que los vecinos decidan qué pasos van a seguir a partir de este momento.