Ocho familias que habitaban un bloque de la Plaza de la Rincona han tenido que abandonar el mismo ante la presencia de una grieta y el riesgo de derrumbe del mismo. Así, un técnico ha puesto sobre la mesa a estas familias este problema, por lo que su seguridad dentro de estas viviendas no está garantizada. En estos días han sacado sus enseres y se han marchado del mismo.
Ante esta situación el Ayuntamiento de Puertollano ha procedido a acordonar y vallar la zona para evitar que ciudadanos pasen por la misma, explicaba José Antonio Barba, concejal de seguridad en el consistorio puertollanense. A partir de este momento los propietarios de este bloque deberán solicitar a un arquitecto la elaboración de un estudio geológico que contemple las medidas a llevar a cabo en un futuro y la cuantía económica que supondría el arreglo del mismo.
Las ocho familias que habitaban estas viviendas se han desplazado algunos de ellos a vivir con otros familiares, otra tenía una segunda vivienda en otra localidad y otros dos casos se están gestionando a través de servicios sociales para ver su situación y qué ayuda se les podría dar.