Se llama Cristina López, tiene 30 años y vive en Alemania. Es una joven puertollanense que quiere poner en valor los atractivos turísticos de su región para mostrarlos al pueblo alemán y hacer así más atractivo el viajar hasta Castilla-La Mancha. Para ello, Cristina López ha utilizado sus vacaciones en tierras manchegas para realizar parte de la Ruta del Quijote, en total 373 kilómetros, subida a una bicicleta durante un total de ocho etapas.
Cristina López programó esta ruta tras constatar que los alumnos a los que imparte clases en español en Alemania no conocen las tierras castellano-manchegas, tan sólo los típicos iconos turísticos que atraen a esta población a venir a España. Por este motivo, López asegura que “me dio bastante pena y me aventuré a probar yo misma si había algo interesante por esta zona para, después, poder contarlo a mis alumnos y sus familias”. Se subió a una bici que le prestó su tío y comenzó a pedalear por los caminos y las carreteras de esta región, una aventura que subirá a su blog próximamente.
Etapas
La primera etapa partió desde Puertollano, su tierra natal en la que se encuentra disfrutando estos días de vacaciones, hasta la localidad de Almagro; la segunda etapa discurrió hasta Daimiel pasando por las Tablas y la Laguna de Navaseca, la tercera desde Puerto Lápice a Herencia, la cuarta en Campo de Criptana y Pedro Muñoz, la quinta en Socuéllamos y Villarrobledo, la sexta en Munera, la séptima etapa por Ossa de Montiel y las Lagunas de Ruidera y la octava por Villanueva de los Infantes donde finalizó. Una ruta realizada entre el 1 y el 8 de agosto por la Ruda de Don Quijote, la conocida como ruta literaria.
Cristina López reconoce que en Alemania utiliza habitualmente la bicicleta, por lo que está acostumbrada a este medio de transporte “es mi vehículo incluso para ir a trabajar”. Así realizaba unos 50 kilómetros diarios para poder recorrer esta ruta, “aunque la época elegida no ha sido la mejor por las altas temperaturas, pero en encabezoné y la hice”.
Lleva seis años viviendo en Alemania, donde trabaja, y aunque tiene ganas de volver asegura que todavía no ha encontrado el momento, “por motivos laborales me fui a Alemania, probé allí y me salió bastante bien”.
Con todo el material que ha logrado recopilar a lo largo de esta ruta realizada en bicicleta creará un blog para sus estudiantes y poder hacerles “el mismo plan que hice yo”. Está convencida de que encontrarán muchos atractivos para realizarla como es la magnífica gastronomía -incluidas las tapas-, la buena temperatura en otoño y en primavera -no tanto en verano que no están acostumbrados a altos grados-, así como poder practicar el español visitando los pueblos en los que se hacen parada y conversar con sus vecinos. No obstante, asegura que algunos de los caminos por los que tenía que transitar no estaban bien delimitados y dificultaba la tarea. Cristina López traducirá sus videos y todo el material al alemán para poder llegar mejor a esta población.
Puertollanenses que aman a su tierra y que quieren darla a conocer, por los medios que sean, en otros países y potenciar el turismo que puede llegar hasta Castilla-La Mancha. Todo ello de forma totalmente altruista, tan sólo por el amor que sienten por su tierra y los recuerdos que dejan en ella; recuerdos que siempre están presentes allá donde estén y que quieren transmitir a los que ahora están a su lado.