Bajo unas estrictas normas de prevención e higiene, con mascarilla y estableciendo turnos, una veintena de profesionales de Repsol han participado en la jornada de donación que la Hermandad de Donantes de Sangre de Puertollano ha realizado en colaboración con el Complejo Industrial de Repsol.
La crisis sanitaria provocada por la Covid-19 en todo el territorio nacional ha obligado a establecer un protocolo específico para mantener las medidas preventivas con el fin de garantizar la seguridad de los trabajadores que realizan esta actividad solidaria que se realiza habitualmente en el Complejo Industrial de Puertollano.
Para realizar la donación de sangre, se han habilitado dos salas en la clínica del complejo, y los trabajadores han acudido con cita previa, con mascarilla y manteniendo la distancia de seguridad. En esta ocasión, solo han podido participar la mitad de los trabajadores que habitualmente donan, para garantizar la seguridad. Los profesionales de Repsol han sido atendidos por personal sanitario del Hospital Santa Bárbara de Puertollano,
Durante la jornada también han participado miembros de la Hermandad, entre ellos, su presidente, Ramón Moya que ha calificado la colaboración de Repsol con esta iniciativa como “imprescindible” y muy necesaria en unos momentos en los que contar con suficiente stock en los bancos de sangre de los centros sanitarios es “fundamental”, ha asegurado. Además, ha agradecido una vez más la buena acogida de los trabajadores de Repsol, pese haberse reducido el aforo, y ha felicitado la excelente organización y la labor de los servicios médicos de la compañía.
Esta iniciativa solidaria, en la que Repsol participa dos veces al año, es una acción altruista de vital importancia, ya que tanto los trabajadores del complejo como el personal de la Hermandad de Donantes de Sangre, son conscientes de que un pequeño gesto como es el de donar sangre, puede salvar muchas vidas.
