Tras cuatro horas de juicio, ha quedado vista para sentencia la demanda colectiva suscrita por CCOO, UGT y SIE sobre la supresión de los beneficios sociales al personal pasivo de Endesa, una decisión que la eléctrica adoptó de forma unilateral el pasado mes de diciembre.
En el transcurso del juicio Enrique Lillo, el abogado de CCOO, argumentó el derecho que asiste al sindicato bajo dos pilares básicos. Por un lado considera que estos beneficios son un derecho histórico que se remonta a tiempos inmemoriales y, por otro, que tienen un carácter permanente y “ad personam” las condiciones económicas y sociales que pactó este sindicato en los acuerdos de reestructuración societaria del año 1999.
Negociación con sobresaltos
A finales de diciembre, Endesa puso el punto final a la negociación del V Convenio Marco con las secciones sindicales, pero las retomó a finales de enero, por la presión de la plantilla y de la propia Secretaría de Estado de Empleo del Ministerio de Trabajo, que llamó a la eléctrica a negociar bajo el principio de buena fe.
El juicio de esta mañana se produce tras retomarse la negociación. Fue la propia empresa la que denunció el año pasado el convenio con el falso argumento de situar las relaciones laborales en un contexto de modernización y digitalización de la economía. A pesar de ello, se negó a negociar nada que no fuera la eliminación de los beneficios sociales, los recortes de derechos y la precarización de la plantilla.
CCOO denuncia que la actual posición de la empresa es el ataque más grave sufrido por los trabajadores y trabajadoras del Grupo Endesa desde su creación en la década de los 90. Esta actitud fue enfrentada con exitosas movilizaciones en el último año.
