Las más de 500 firmas recogidas para intentar evitar la demolición de la única chimenea de Sevillana que queda en pie tendrán su reflejo este jueves a las 11 de la mañana con una pancarta reivindicativa que se desplegará en las inmediaciones de estas instalaciones en Puertollano. Un momento que servirá para dar fe principalmente de la reivindicación de este colectivo durante su rápido paso por el lugar.
Un acto que convocan los defensores de esta antigua torre de Sevillana y para la que promovieron esta recogida de firmas. En este sentido, invitan a los interesados a sumarse a esta reivindicación y a concentrarse en este lugar. Este colectivo de personas afirman, a través de un comunicado, que “cuanto mayor sea el número de personas que nos sumemos a este acto mayor será la fuerza de esta reivindicación ya que las tareas de desmontaje de estas instalaciones se han iniciado, e incluso acelerado, desde el mismo momento en que se dio a conocer públicamente la recogida de firmas para evitar la desaparición de esta chimenea emblemática ya en nuestra ciudad, al ser la única que queda en pie de las dos centrales térmicas que hubo en su día”.
Así, este grupo de personas preocupadas por la recuperación y mantenimiento del patrimonio industrial aún existente en las inmediaciones de la ciudad pretenden que “este símbolo industrial quede en pie para las futuras generaciones, como legado histórico de lo que fue en su día Puertollano” según reza en el escrito donde más de medio millar de ciudadanos han estampado su firma.
Conservar la chimenea y mucho más
Una chimenea de salida de humos que tiene unos 120 metros de altura, estructura de hormigón y balizamiento que, para este grupo de personas, entre las que hay extrabajadores de Sevillana, antiguos componentes de su comité de empresa y representantes sindicales, no es la única estructura a recuperar y mantener del patrimonio industrial, también hay otras muy valiosas como una gran turbina, de varias toneladas de peso, que está muy próxima a ella y que podría quedar expuesta en ese mismo lugar o en cualquier otro a determinar.
Además, también defienden la conservación del puente de hierro del rio Ojailén, hecho solo con remaches, sin ningún tipo de soldaduras, que se encuentra en la barriada de ese mismo nombre, antiguos castilletes mineros y otras muchas estructuras diseminadas y olvidadas en las inmediaciones de la ciudad. Si bien tanto el puente como los castilletes mineros tienen una cierta protección, al estar incluidos en la carta arqueológica local, se reivindica el mantenimiento necesario para impedir su degradación tanto por el paso del tiempo como por las inclemencias meteorológicas.