En la ciudad de Puertollano fueron muchos los ucranianos que hace más de una década fijaron su residencia en esta localidad. Tras el cierre de la empresa Silicio Solar muchos de ellos regresaron a su tierra o se trasladaron a otras zonas del país buscando trabajo, algunos siguieron viviendo en Puertollano donde ya habían formado su familia. En el año 2020 eran 48 personas de nacionalidad ucraniana las que estaban registradas en la ciudad y en este 2021 son alrededor de 35.
Victoria Melnychenko es una mujer ucraniana que vive en Puertollano desde hace ya dos décadas y que está viviendo, como toda la comunidad ucraniana, con mucha incertidumbre la situación de su país. Reconoce que ayer se puso en contacto con su familia, residentes en Jersón -una de las primeras zonas del conflicto bélico que Rusia ha emprendido contra este país- quienes cuentan que no tienen luz ni agua, por lo que la preocupación para los ucranianos que residen en España es cada vez mayor conociendo la situación a la que se están enfrentando.
Así pues, el contacto con ellos ha sido posible por lo menos en las primeras horas de este conflicto bélico, si bien Victoria es consciente que será cuestión de días la ausencia de comunicación con ellos ya que si no tienen luz no podrán ir cargando sus móviles para seguir en contacto con sus familiares.
La desolación de estas personas ucranianas que se encuentran lejos de su país y que tienen allí a familiares y amigos es grande al charlar con ellos porque saben que «ya han bombardeado puentes y aeropuerto, la gente está muy asustada».