Belén Rodríguez
Ciudad Real
Quantum Minería cree con firmeza en el proyecto de abrir una mina para extraer tierras raras en el Campo de Montiel, y asegura que la negativa de ampliación del plazo del estudio de impacto ambiental del Gobierno regional no es un obstáculo insalvable. “Tendremos preparada la documentación en plazo”, en torno al 18, 19 de febrero, cuando expiran los tres meses concedidos por la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente, confirmó este jueves a Lanza Raquel Vergara, una de las directivas de la empresa que por ahora está más cerca de abrir la primera mina para extraer “monacita gris”, aclara, en Europa.
Desde ese momento y según la legislación de minas vigente la administración tiene que examinar la documentación, pedir estudios o informes adicionales, decir que está perfecto o denegarlo, en cualquier caso se tiene que hacer público y se volverá a abrir un periodo de alegaciones.
“Nuestro proyecto de mina a cielo abierto es sencillo y no genera ningún impacto, es muy parecido a una gravera”, insiste Vergara, y en cuanto al obstáculo que de entrada puede suponer un mayor problema para la actividad: el consumo de agua, la portavoz reitera que tienen dos opciones, o bien conseguirla de pozos con la pertinente autorización, “o incluso traerla con cisternas si fuera necesario de la zona o de desaladoras del mediterráneo”. No obstante asegura que el agua “no nos preocupa especialmente porque la que necesitamos el proyecto la soporta. El agua muy importante y hemos conseguido ajustar la necesidad a 100.000 metros cúbicos al año”.
Harta de que le pregunten por qué en ese término municipal, entre Torrenueva y Torre de Juan Abad sostiene que el sitio idóneo, tanto por las condiciones geológicas como por la concentración de monacita. “Está a un nivel muy superficial y en terrenos de fácil acceso en los que como mucho profundizaremos a dos metros y medio”.
Lo que ha hecho está empresa, cien por cien de capital español y constituida en 2011, es recuperar información antigua, de los años noventa. Entonces el precio no era lo suficiente interesante y la tecnología no estaba desarrollada para abrir una mina de las denominadas tierras raras cuyos componentes se utilizan en la fabricación de productos relacionados con las nuevas tecnologías (coches eléctricos, híbridos, turbinas, etc).
Quantum Minería solicitó en 2013 cuatro permisos para investigar tierras raras entre los términos municipales de Torrenueva, Torre de Juan Abad y Santa Cruz de Mudela (Matamulas, Mulas, Rematamulas y Rematamulas II), pero renunció el año pasado a uno de ellos, aunque sigue mantiene el interés en el resto, pese a la oposición que lidera la plataforma vecinal Sí a la Tierra Viva e incluso el rechazo de la administración regional que ha expresado sus dudas sobre la sostenibilidad del proyecto, incluso pese a haberles concedido el alcance del estudio de impacto ambiental (un trámite regulado por la ley).
En principio Quantum limita su mina a 300 hectáreas en las que quiere trabajar extrayendo monacita diez años.