Los regantes de las masas de agua sobreexplotadas del Alto Guadiana Consuegra-Villacañas y Rus-Valdelobos están dispuestos a asumir un recorte moderado del consumo del uso de agua para la campaña 2020, en torno al 5%, pero no el 10% que reclama el organismo de cuenca.
La asociación de usuarios de Consuegra-Villacañas introduce además un matiz: reducir el consumo un 5%, pero condicionado a la pluviometría del otoño-invierno, y en caso de que no sea buena que se aplique la restricción a partir del inicio de la campaña de riego, por marzo.
Rus-Valdelobos, la propuesta intermedia de la Junta
Rus-Valdelobos también se opone al 10% de restricciones respecto a 2019 que plantea la Confederación del Guadiana, pero aceptaría la propuesta intermedia, planteada por la Junta de Comunidades, de reducir un 5% el consumo para herbáceos y un 6,67% en leñosos, en tanto dure la situación de emergencia en la zona.
Todas estas propuestas se elevarán como conclusiones de las juntas de explotación que se han celebrado este martes en la Comisaría de Aguas de Ciudad Real, presididas por el comisario de aguas adjunto Domingo Fernández. El paso final llegará el mes que viene, cuando se reúna la junta de gobierno de la Confederación del Guadiana y se aprueba el régimen de extracciones.
Los acuíferos del Alto Guadiana, 6 años en retroceso
Tras años de sequía prorrogando los consumos del agua subterránea en el Alto Guadiana, -limitados por la situación de sobreexplotación de los acuíferos en la mayoría de los casos desde los años ochenta-, la Confederación Hidrográfica ha decidido ponerse seria ante la bajada de los niveles piezométricos de los acuíferos y pedir un mayor esfuerzo en el ajuste de los consumos a las comunidades de usuarios.
Los acuíferos manchegos llevan seis años en retroceso, de ahí que se intente limitar un poco más el uso del agua para el riego, que es el que más consume.
Las propuestas que irán a junta de gobierno
Según datos facilitados por la Confederación en un comunicado, en la masa Consuegra-Villacañas la CHG propone reducir el 10% el riego respecto a las asignaciones de 2019, de manera que la dotación máxima sea 1.980 m3/ha para herbáceos y 1.350 m3/ha para leñosos. Y todo “ante la situación de alerta en la que se encuentra la UTE 03 Cigüela- Záncara, según el último informe de sequía y escasez, y estando próxima al umbral de emergencia”.
La comunidad de usuarios propone prorrogar el régimen de extracciones de 2019 (1.500 m 3 /ha para cultivos leñosos y 2.200 m 3 /ha para cultivos herbáceos) condicionado a la pluviometría de otoño-invierno, de manera que si no se invierte la situación actual se aplique una restricción del 5% sobre las dotaciones anteriores a partir del inicio de la campaña de riego.
Desde la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla La Mancha se propone una dotación de 2.100 m 3 /ha para cultivos herbáceos y 1.400 m 3 /ha para cultivos leñosos lo que supone una reducción del 4,5% y del 6,67% respectivamente, indicando que esta situación estaría en vigor mientras durase la situación de alerta. La CHG ha valorado positivamente la propuesta que realiza la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha.
Con argumentos parecidos la CHG ha solicitado un recorte del uso del agua del 10% en la masa de agua subterránea Rus-Valdelobos.
Los regantes, en sintonía con la Junta
En sintonía con la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla La Mancha los usuarios de la masa Rus-Valdelobos han propuesto por su parte una dotación de 1.900 m 3 /ha para cultivos herbáceos y 1.400 m 3 /ha para cultivos leñosos lo que supone una reducción del 5% y del 6,67% respectivamente. La restricción estaría en vigor mientras dure la situación de emergencia.
Las juntas de explotación de las masas de agua subterránea Mancha Occidental I y II, las que más afectan a la provincia de Ciudad Real, se reúne este miércoles.
El grueso del consumo, en el acuífero 23
El grueso de los consumos de agua subterránea en el Alto Guadiana (de la que depende buena parte de la agricultura de Ciudad Real) está en las masas que se asientan sobre el antiguo acuífero 23, el gran mar subterráneo de Ciudad Real. Así Mancha Occidental I tiene autorizado un consumo anual de 91,2 hectómetros cúbicos, Mancha Occidental II 106,2, Rus-Valdelobos 24,6, Sierra de Altomira 26, Lillo-Quintanar 17 y Consuegra-Villacañas 28. Y eso con la declaración de sobreexplotación que pesa sobre ellos.