La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, ha destacado la valiosa trayectoria del IES Maestro Juan de Ávila de Ciudad Real en la formación de decenas de generaciones y, especialmente, la aportación precursora en la metodología experimental a la hora de transformar la sociedad.
En la presentación del libro ‘175 años enseñando. El IES Maestro Juan de Ávila de Ciudad Real. Un instituto histórico’, Rodríguez ha llamado la atención de porque un centro educativo, a priori pensado para ser una escuela de Filosofía, contara entre sus dependencias con un jardín botánico. Pode manifiesto “la importancia de la naturaleza y de la ciencia en el entorno educativo” de la época, ha dicho a los periodistas antes de presidir el acto de presentación del volumen, a la vez que ha reivindicado la vigencia de este modelo “experiencial y manipulativo” como parte del conocimiento.

A su juicio, “hay que seguir luchando por esta metodología”, iniciada por docentes de hace casi dos siglos, que “entendieron que era parte fundamental en el proceso de conocimiento y aprendizaje”. El estudio de las plantas sumó conocimiento, ha explicado, a lo que ahora se conoce como inclusión educativa, al margen de formar “no sólo a las élites sociales sino también intelectuales”.
También ha dado valor a la historia del instituto, creado en 1843 por el general Espartero, que es “la propia historia de la educación en Castilla-La Mancha y en todo el país”. Ha ensalzado, igualmente, “la magnífica labor de documentación” que atestigua el protagonismo de este y otros establecimientos educativos “en el conjunto de la sociedad”, y su capacidad “para transformar la sociedad en la que nacen y se desarrollan las personas”.

“Estamos hablando de más de 175 años de historia de un instituto que debió ser uno de los primeros del país”, y que por tanto, “forma parte de la historia de nuestra patria” y de todos los acontecimientos históricos del convulso siglo XIX, desde la época isabelina a la Restauración borbónica. También vivió todo el siglo XX, desde la dictadura de Primo Rivera, pasando por la segunda república hasta la dictadura Franquista.
De la misma manera, es otro referente en el ámbito educativo, para la consejera. «Si en 1802 se habla de la educación como un referente en el ámbito constitucional y el centro es de 1943, hablamos del primer testimonio institucional en la educación de este país».
Sus clases han sido ejemplo de distintos modelos educativos a través de sus leyes, ha reflexionado, desde la de Moyano (1857-1970), con 100 años en vigor, la de Villar Palasí (1970) hasta la actual. «ES un ejemplo en la historia de la pedagogía y también de momentos de progresión y de regresión en la educación».

Recuerdo escrito
Para Jesús López-Maestre, uno de los cuatro autores del volumen, junto a Pedro José del Real, Beatriz Crespo, y Carlos Carnicer, el libro servirá de resorte escrito de la historia viva de la provincia de los últimos años. El libro es, para el profesor de Griego y del ámbito sociolinguístico del centro, una compilación de la herencia mostrada con distintos materiales en una exposición hace tres años, con motivo de la efemérides.
“Simboliza el recuerdo que quisimos dejar a través de varias etapas desde 1967 hasta la actualidad”, en concreto, con personajes como José Patricio Clemente, que donó una preciosa colección de libros acerca de Filipinas en su etapa colonial, además de la historia de la Plaza de los Mercedarios, que fue huerto del Convento de la Merced y posteriormente, Jardín Botánico del centro educativo.
La muestra se colgó en el Convento de la Merced y recogía, entre otro material, los expedientes de personajes ilustres que estudiaron en el centro como Inocente Hervás y Buendía, José María de la Fuente, Francisco Aguilera, Ángel Andrade, Carlos Vázquez, José Castillejo, Gabriel Miró, o Cirilo del Río