El arreglo de la calle Santa Elena, demandado por los vecinos y vecinas de Alcázar, se encuentra en su fase final y, si el tiempo lo permite, las obras estarán finalizadas antes que finalice el mes de marzo.
La vía está siendo adoquinada y se ha hecho totalmente accesible, para facilitar el tránsito de vehículos y de personas con movilidad reducida. Se arreglará al completo, en los dos tramos de acceso, desde la Rondilla de la Cruz Verde a la Calle Antonio Castillo (esta última adecentada también el pasado verano). En cuanto a las zonas de aparcamiento, se mantiene el ensanche al final del tanatorio, y no se podrá estacionar en el resto de la calle.
“Hemos primado los interés de los peatones al de los vehículos, como hacemos en el resto de la ciudad”, comentó la alcaldesa alcazareña, Rosa Melchor, tras asegurar que estas obras “eran necesarias porque es una zona muy concurrida y se merecía lo que se ha hecho”.
“Ahora es más fácil acceder y queda más vistosa. Otra promesa más cumplida”, añadió. La primera edil agradeció también el trabajo de los empleados municipales que han sabido solventar con éxito los problemas que presentaba la sustitución del asfalto por adoquinado.