El Consorcio de Residuos Sólidos Urbanos (RSU) de Ciudad Real mantiene que todas sus instalaciones y equipamientos, tanto en su planta principal en la se localiza el vertedero de residuos y los centros de reciclajer en Almagro, como en el resto de la provincia, cumplen con la normativa vigente en materia medio ambiental y de seguridad.
El consorcio replica así a la denuncia del grupo municipal Almagro Sí Puede, cuyo concejal Ismael Parras afirma que se ha producido un vertido de lixiviados (líquido resultante de la descomposición de materia orgánica y contaminante) en las cercanías de la planta de vertidos almagreña.
El concejal opina que esto pone en evidencia de nuevo que el vertedero “no garantiza ni ha garantizado la protección del medio ambiente y la salud de las personas”. Almagro Sí Puede dice que ha tenido conocimiento de esto por el informe que le ha remitido el Gobierno regional, sobre las condiciones del vertedero de residuos sólidos urbanos. En concreto se refiere a un informe del pasado mes de mayo, en el que un agente medioambiental denunció la existencia de un vertido de lixiviados, procedentes de la planta de RSU, en una parcela próxima.
Sin embargo, el Consorcio RSU replica que “los ciudadanos pueden tener la tranquilidad de que sus residuos son tratados debidamente en las instalaciones que se han construido, tanto en las actuales, como en las antiguas” y niega que haya habido vertidos “que hayan puesto en riesgo la salud de las personas, ni ocasionado contaminación en los terrenos adyacentes, ya que está totalmente precintado y con el tratamiento que requieren este tipo de instalaciones”.
RSU admite quue las abundantes lluvias de los meses pasados inundaron una pequeña parte de una parcela de cereal próxima a la instalación, “pero no se puede afirmar que técnicamente no está comprobada que la causa de la merma de cosecha se deba a la existencia de lixiviados”.
Además critican que Almagro Sí Puede “trate de empañar la gestión y el compromiso de este organismo con la protección y el cuidado del medio ambiente”.
El consorcio también recuerda que el nacimiento del consorcio en el año 1980 se debió a la necesidad de que los ayuntamientos pudieran contar con una herramienta “que les permitiera dar respuesta medioambientalmente correcta al problema de la gestión de residuos y acabar con los vertederos incontrolados”.