J. Y.
Ciudad Real
La destilación obligatoria y a coste cero propuesta por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), acordada en julio por una amplia mayoría de representantes del sector y regulada recientemente en un Real Decreto por el Gobierno quedará en suspenso, tras meses de confrontación entre las organizaciones industriales, productoras, elaboradoras y destiladoras que no alcanzaron un respaldo unánime a la medida.
Este viernes, el propio sector acordó junto a la Administración la no aplicación de esta herramienta en una reunión en la que se constató el buen momento comercial que atraviesa la venta de vino, la reducción de existencias en cuatro millones de hectolitros, y la previsión “asumible” de cosecha de este año, con 40 millones de hectolitros a nivel nacional, y 22 en Castilla-La Mancha.
De esta manera, la paralización de la destilación de 4 millones de hectolitros de vino para usos industriales fue recibida con satisfacción por portavoces de todos los subsectores vitivinícolas tras el encuentro celebrado para analizar la situación del mercado y valorar la aplicación del RD en la campaña 2013-2014.
El secretario regional, de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Julián Morcillo, volvió a reiterar su rechazo a la medida (la criticó desde el principio) e informó de que en la sectorial se constató la tendencia alcista de ventas. También censuró las consecuencias del anuncio de la destilación, que “ha traido unos precios que son los que son, y que están por debajo de los costes de producción”. Por tanto, de haberse aplicado, “ese viaje que no va a ningún lugar”, “hubiera sido muy desastroso”.
Por unanimidad
El portavoz de vinos de Cooperativas Castilla-La Mancha, Francisco Garrido, confirmó que la decisión de este viernes “fue tomada en un acuerdo por unanimidad”, una vez que el Magrama presentó el balance de la situación del sector, “con los precios al alza y una calidad superior de los vinos”.
Comentó que el acuerdo “es satisfactorio y las perspectivas mucho mejores”, debido a que en los últimos dos meses se han vendido en el mercado internacional entre 4 y 5 millones de vino, lo que sumará 22 millones en exportaciones, cinco más que las del pasado ejercicio. “Ello demuestra que la cooperativas han hecho un buen trabajo”, subrayó.
El presidente regional de ASAJA, Fernando Villena, realizó una valoración en este sentido y secundó la labor realizada por bodegas y cooperativas en los últimos meses “que se ha traducido en una importante reducción de las existencias, (a 31 de julio había en Castilla-La Mancha 10,4 millones de hectolitros) que ha evitado la puesta en marcha de la destilación.
Este portavoz incidió en que el stock ha caído en un 43% entre abril y julio (en marzo había 18,3 millones), según datos de la Consejería de Agricultura.
No debió acordarse
Rafael Torres, presidente de la Cooperativa ‘Virgen de las Viñas’, también vio con buenos ojos la decisión de la sectorial al señalar que “está bien que no se aplique, aunque no debió instaurarse nunca”. A su juicio, habría que marcar unos límites a los productores para “que no se pasen en cantidad”. Ahora, “con buenas perspectivas, esperamos un justiprecio para los agricultores con arreglo a cada explotación agrícola”.
Fernando Villena, presidente de la cooperativa Vinícola de Tomelloso, señaló que “es mejor que no haya hecho falta” la destilación, aunque la destilación no afectaba a esta entidad porque “el año pasado llegamos a final de campaña sin existencias”.