Llega la nueva temporada general de caza 2023-2024 (se abre este domingo 8 de octubre hasta el 21 de febrero) con un escenario más positivo que el del año precedente, sobre todo en las especies cinegéticas mayores, con más presencia de ejemplares y trofeos de calidad.
La Fundación Artemisan habla de superpoblación de jabalíes, ciervos y corzos, que confirma Manuel Aranda, presidente de la Federación provincial de Caza, aunque el territorio provincial esté fuera de la declaración de emergencia cinegética, como ha ocurrido en otros territorios de España.
El jabalí es la especie más abundante en el territorio ciudarrealeño -con grandes fincas de uso privado y público-, con presencia de ejemplares “incluso en zonas donde jamás lo ha habido”. Por ello, “esperamos buena campaña”. Por ello, la Consejería de Desarrollo Sostenible ha establecido medidas para el control de este suido en Ciudad Real y en el resto de provincias de Castilla-La Mancha.
El ciervo tiene, igualmente, un importante peso entre las especies cazables, a pesar de los efectos que ha tenido la Enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE). El impacto ha “sido mínimo”, según Aranda, quien celebra que en el último mes “la provincia esté limpia”.
En el caso del corzo macho está “en expansión”, aunque su veda terminó el 30 de septiembre (entre el 1 de abril y el 31 de julio de 2024 se podrá volver a abatir en la modalidad de rececho, aguardo o espera en horario diurno.
Estos dos ungulados -ciervo, corzo- también tendrán planes adicionales de control en Cuenca, y en Guadalajara y en Albacete para la cabra montés.
Por su parte, la caza del muflón y el gamo “dependerán del plan de ordenación cinegética de las fincas”, indica el cazador ciudarrealeño.
El conejo mantiene una gran densidad, a pesar de haber bajado un poco parece que ha bajado “un poco”, mientras que la liebre “se está recuperando gracias al esfuerzo de los cazadores”.
Respecto a las aves, la paloma torcaz, la paloma zurita y la codorniz se han podido abatir en septiembre en la media veda, con los mejores resultados en la primera especie.
Ante la nueva campaña, los cazadores federados tienen programadas, informa Aranda, un total de 11 batidas de especies mayores en las fincas consorciadas con la Junta de Comunidades en Castilla-La Mancha, donde se practica el sistema social. Precisamente, Castilla-La Mancha tiene nueve cotos sociales, sumando el último habilitado en La Puebla de Don Rodrigo, con 13.000 hectáreas destinadas dicha actividad.
Número de federados
La cifra actual de federados en la comunidad es de 15.000, un tercio -5.000- pertenecientes a la provincia de Ciudad Real. Se trata de un número mantenido en los últimos años, explica Aranda, por la incorporación de jóvenes, pero, sobre todo, de mujeres, en crecimiento constante, que les ha permitido entrar en las competiciones de caza menor.
La región también suma hay 150.000 licencias de caza, más de un 10% en Ciudad Real.
La actividad cinegética tiene una contribución muy significativa en la economía de Castilla-La Mancha, al movilizar 600 millones de euros al año -en España genera 6.500 millones-, crea cerca de 14.000 empleos -de los 186.800 a nivel estatal-, y representa el 1,7 % del PIB autonómico -en España representa un 0,3 % del PIB y un 13 % del sector agrario-.