Laura Rojo, encargada de Stradivarius, cuya nueva tienda abrió sus puertas el pasado jueves en la capital, comenta a Lanza que una vez que la provincia ha entrado en la fase 1 “hemos notado una mayor afluencia de público respecto a cuando estábamos en la fase 0 y teníamos que atender mediante el sistema de cita previa. No en vano, esperamos que, a partir del próximo lunes, cuando ya estemos en la fase 2, los clientes se vayan animando aún más y podamos ir incrementando paulatinamente las ventas”.
Rojo explica que justo antes de la inauguración, que tuvo lugar sobre las doce de la mañana “ya había gente en la calle haciendo cola para entrar en la tienda. Eso sí, todos estaban guardando la distancia de seguridad establecida”. En este sentido indica que durante la fase 1 el aforo dentro de la tienda está limitado, al no poder estar “más de 45 personas, contando a los trabajadores y a los clientes”.
Con el fin de establecer las medidas sanitarias y de seguridad pertinentes con motivo del coronavirus, además de disponer de dispensadores de gel hidroalcohólico, en Stradivarius se han instalado mamparas protectoras y se desinfectan los probadores cada vez que pasa una persona. En cuanto a la ropa que se prueban los clientes y que no se llevan a sus casas, se procede a separarla del resto para higienizarla a alta temperatura con calor.
Para Rojo los últimos dos meses en los que la actividad ha estado prácticamente parada “han sido duros”, pues “hemos estado sin ventas directas y únicamente podíamos vender on-line. Afortunadamente la situación va mejorando poco a poco”.
Como novedad, la tienda de Stradivarius dispone de dos máquinas con dispositivo de auto cobro, que ya están funcionando a pleno rendimiento y que son las primeras que el Grupo Inditex instala en Ciudad Real.
Los clientes con los que se ha puesto en contacto este digital destacan la buena ubicación que tiene la nueva tienda de Stradivarius, así como su vistosidad y luminosidad, al entrarle mucha luz desde la calle.
