La localidad de Terrinches ha sido el marco escogido para presentar en sociedad a ‘Luciano’, la reconstrucción completa de un cráneo de 4.000 años de antigüedad, que estaba enterrado en uno de los túmulos del yacimiento prehistórico de esta localidad del Campo de Montiel conocido como Castillejo del Bonete.
Después de dos años de arduo trabajo llevado a cabo por la Escuela de Medicina Legal de la Universidad Complutense de Madrid, los investigadores han logrado reconstruir en su totalidad el rostro de ‘Luciano’, llamado así en honor a la patrona de la localidad, Nuestra Señora la Virgen de Luciana.
La reconstrucción del cráneo de Luciano ya fue presentada ante la sociedad el pasado mes de noviembre, aunque “a nivel científico” ya que sólo podía vislumbrarse su rostro. Sin embargo, ahora se le han incorporado los rasgos faciales, cabello, vello, etc. El magnífico estado de conservación del cráneo en el momento en el que se encontró sirvió para su reconstrucción completa y conocer de primera mano cómo era este vecino del Campo de Montiel de hace 4.000 años.
Según ha explicado una de las investigadoras de ‘Luciano’, María Benito, en diversas ocasiones, la edad ósea del hombre indicaba que se trataba de un varón de alrededor de unos 50 años. En cuanto al estudio paleopatológico, desveló que tenía la columna vertebral con una curvatura más exagerada de lo normal, “lo que nos indicaba que era una persona de edad avanzada”. Igualmente, el estudio de los brazos, de los marcadores asociados al movimiento, mostraron que se trata de un varón acostumbrado al uso del arco. Además, tiene un traumatismo encima del ojo derecho con regeneración, “lo que quiere decir que lo superó, que sobrevivió a ese episodio traumático”.
En este acto se han presentado las distintas réplicas en escayola y 3D con las que los investigadores han estado trabajando y continúan haciéndolo, además del cráneo original.
Con la presentación en sociedad de Luciano se ha puesto punto y final a las jornadas impulsadas por el Ayuntamiento de Terrinches para poner en valor el yacimiento del Castillejo del Bonete, así como el resto del patrimonio de la localidad. Unos actos que se iniciaron con la visita al yacimiento y poder observar el solsticio solar del verano desde allí, al igual que lo hacían sus antepasados hace 4.000 años.