La Fundación Internacional para la Restauración de Ecosistemas (FIRE), en colaboración con la AD Tierras de Libertad, se encuentra trabajando en la recuperación de la biodiversidad del Campo de Montiel a través de la mitigación del impacto de la agricultura en especies como la avutarda, el buitre negro o el águila de Bonelli, entre otros, dentro del proyecto ‘Campo de Montiel + natural’. Una labor que se realiza gracias a que la comarca del Campo de Montiel forma parte de la ‘Rewilding European Network’, en la que participan diferentes entidades para desarrollar acciones de naturalización de ecosistemas.
La fundación FIRE lleva a cabo actuaciones en colaboración con los agricultores de la comarca para que las especies salvajes cuenten con pequeñas áreas de cultivos “renaturalizados” donde obtener sus alimentos o disponer de hábitat.
En línea con estas actuaciones, FIRE también fomenta el establecimiento de negocios basados en la naturaleza, ya que no solo se busca la restauración de los ecosistemas, sino que esa restauración sirva como motor de cambio de la actividad económica en sintonía con la naturaleza.
Estas iniciativas coinciden con los objetivos fijados por el programa de desarrollo comarcal LEADER 2014/2020 y que en el Campo de Montiel gestiona la Asociación Tierras de Libertad. Objetivos como la sostenibilidad social, económica y ambiental de la comarca, ya que desde la asociación consideran que el progreso a largo plazo “solo se alcanzará si hay equilibrio entre esas tres variables”.
Además, con estas actuaciones se complementa la promoción de los productos agroalimentarios de calidad, que bajo la marca ‘Campo del Quijote’, está llevando a cabo la AD Tierras de Libertad. Marca con la que se agrega el valor tradicional de estos productos y la variante de sostenibilidad, ya que cada vez son más los consumidores preocupados por el impacto ambiental del producto que adquieren.
Desde la AD Tierras de Libertad dan la bienvenida a iniciativas de este tipo y animan a todos los ciudadanos del Campo de Montiel, especialmente a los agricultores, a que, en la medida de sus posibilidades, adopten estas sencillas prácticas de restauración de sus cultivos porque los beneficios en la salud son mucho más altos que el pequeño coste que puedan tener.
