La Patrona de Tomelloso recorre en la noche de este domingo las calles de su ciudad arropada por cientos de fieles en el día principal de la Feria y Fiestas. Los devotos han acompañado a la imagen de la Virgen de las Viñas en esta calurosa tarde del 25 de agosto. Siguiendo el llamamiento de la Hermandad, un buen número de mujeres desfilan tocadas con mantilla en una procesión que no había acabo a la hora de redactar esta crónica.
La Virgen desfila —escoltada por cuatro guardias civiles— acompañada por su Hermandad, con el presidente, Alejandro Ramírez Soriano al frente, Las Madrinas del 2023 y las Madrinas y los Padrino del 2024. En la comitiva estaban el alcalde de Tomelloso, Javier Navarro y los concejales del equipo de gobierno y del Grupo Socialista, además de distintos sacerdotes de Tomelloso. No han faltado en el cortejo profesional hermandades, entidades de los diferentes colectivos de la localidad y distintas empresas. Han acompañado en el desfile procesional antiguos presidentes de la Junta de la Virgen de las Viñas y representantes de las hermandades patronales de Argamasilla de Alba, La Solana y Campo de Criptana. La música la ha puesto la Banda de Música de la Asociación Musical “Santa Cecilia”.
Un día muy emotivo
El alcalde de Tomelloso, Javier Navarro, que ha atendido a los medios antes del inicio del desfile procesional, ha recordado que la Feria y Fiesta de Tomelloso se celebra en honor a la Virgen de las Viñas. “El de hoy está siendo un día muy emotivo, la función religiosa de esta mañana”, ha felicitado el primer edil al oficiante, el párroco de los Ángeles Antonio López, “por una homilía muy bonita”.
Esta tarde “lucimos a nuestra Patrona por las calles de Tomelloso para que los vecinos puedan disfrutar de la presencia de la Virgen de las Viñas”. Ha aprovechado el alcalde de Tomelloso para desear a vecinos visitantes una feliz feria y fiestas.
La procesión, que ha salido pasadas las 9 de la noche de la parroquia de la Asunción está recorriendo las calles Independencia, Santa Rita, Doctor Cajal y Don Víctor, para acabar en la plaza de España