Este viernes ha hecho su primera aparición pública en Tomelloso el colectivo feminista “Las Terreras”. Lo ha hecho en la Plaza de España en una desapacible noche de invierno que no ha impedido que varias decenas de personas hayan podido escuchar su desgarrador mensaje de denuncia sobre la triste situación que siguen viviendo muchas mujeres. Tras las intervenciones, los asistentes han podido dejar sus mensajes, testimonios y dibujos en unas cartulinas y se ha lanzado humo violeta para conmemorar este Día Internacional de la Mujer.
Inma ha sido la primera en tomar la palabra señalando que “esperamos contar con todas vosotras y estamos abiertos para recoger vuestras ideas y propuestas. En este día conviene no perder de vista ese camino en el que tanto hemos peleado y el legado que nos dejan las mujeres del pasado”. Ha asegurado que el colectivo irá más allá del ámbito local “para potenciar el feminismo y seguir luchando por nuestros derechos, favoreciendo la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y para que, de una vez por todas, se ponga fin a tantos abusos y que las mujeres puedan compartir su espacio”.
Después Adriática ha enumerado las razones que han llevado a las mujeres a manifestarse en este 8 de marzo, recordando a las víctimas mortales de la violencia machista desde el 1 de enero del 2023 hasta el día de hoy, “17 de ellas en nuestra provincia”, también a las mujeres víctimas de violencia sexual, la mitad menores.
“Salimos a la calle por el acoso callejero que seguimos sufriendo, por la brecha salarial en nuestros trabajos y por esos techos de cristal que nos impiden llegar a puestos de poder, salimos a la calle porque no queremos aguantar ese acoso laboral que sufrimos día a día, salimos a la calle por todas las mujeres que cuidan a hijos y mayores, también salimos a la calle para rechazar la explotación de las mujeres y también salimos por esas políticas de ultraderecha que están intentando que las mujeres retrocedamos en derechos y también salimos por todas esas mujeres rurales que no han visto reconocida su labor y sus dobles jornadas en el campo y en la casa, como las terreras o las jornaleras. También salimos a la calle por esas mujeres que también sufren violencia y discriminación fuera de nuestras fronteras y también por esas niñas y adolescentes a las que no queremos dejarles un futuro en el que sus derechos están amenazados”.
En ese manifiesto se ha exigido “una educación en igualdad para un futuro feminista. Juntas somos imparables”.
