El padre de Elena Jiménez Calero vino al mundo en plena Romería hace 67 años y no es de extrañar que los genes de su hija contengan ese apego y fe que le profesa a la Virgen de las Viñas y a todo lo relacionado con las raíces y tradiciones de su querido Tomelloso. Ese sentimiento lo ha expresado con pura sinceridad y sentimiento este viernes en un bellísimo pregón en el que la periodista ha mezclado magistralmente poesía, narración y canto. Los versos que su abuelo, Vicente Jiménez, escribió a la Virgen allá por 1944 le han servido de preciosa introducción, Madre de los labradores; dueña de quien por tu mano; bendices este llano y enjugas nuestros sudores. Los ha recitado con esa voz radiofónica que sabe modular y dar el tono adecuado a cada frase.
Félix Díaz ha presentado el acto que también ha tenido como protagonistas a Javier Perales, investido como Mayoral 2025, y la asociación folklórico musical Virgen de las Viñas que ha ofrecido el pregón musical en un Auditorio López Torres prácticamente lleno. El acto ha contado con la presencia del alcalde, Javier Navarro; la directora general de Asuntos Europeos, Nazareth Rodrigo; la delegada de la Consejería de Hacienda, Inmaculada Jiménez; concejales del equipo de gobierno y del grupo socialista y el presidente y directivos de la Hermandad.
“Gracias por permitirnos vivir otra Romería en tu honor”, ha manifestado la pregonera dirigiéndose a la Virgen. Como periodista y tomellosera ha demostrado un profundo conocimiento de la fiesta, describiendo diversos pasajes de la celebración, entremezclados con cantos de folklore que han sido largamente aplaudidos por el público. “Es imposible no estremecerse ante la devoción del pueblo de Tomelloso por su Reina de las Viñas”, ha dicho para referirse después a los curiosos nombres de las peñas de jóvenes, la tradición de las reatas, el encanto del camino hacia el Santuario del domingo por la mañana, el mágico sábado de vísperas, el virtuosismo de Félix Godoy a la hora de arreglar la imagen de la Virgen, los juegos en el pinar o esa misa de campaña que se vive con tanta devoción.
Pero si algo ha marcado las Romerías de Elena Jiménez ha sido el folklore “han sido veinte romerías con mi querido grupo Manantial del Vino, anunciando con fandangos y rondeñas su llegada. El corazón me da un pellizco cuando veo pasar al que siempre será mi grupo”.
Tomando prestada la frase que tantas veces pronuncia Isabel Cañas, la pregonera ha pedido a la Patrona “que siga extendiendo su mano para proteger a Tomelloso” y ha abogado por que se siga transmitiendo este sentimiento romero de generación en generación. Poco antes de entonar ese “Allá va la despedida…”que cantan los que se suben a las tablas, Elena ha hecho alusión a ese trabajo para conseguir que la Romería de la Virgen de las Viñas sea declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. “Simiente a simiente, lograremos elevar nuestra Romería al Interés Nacional que merece. Que a tercos, no nos gana nadie”, ha dicho con esa espontaneidad y gracia que siempre le acompañan
En medio de una larguísima ovación, con muchos de los presentes emocionados, a Elena le han impuesto la blusa tomellosera y el pañuelo de hierbas, además de un diploma que conmemora un acto que, seguro, nunca olvidará
Tras el pregón, ha llegado el momento de investir al nuevo Mayoral. Esther Belló, Mayorala saliente, ha entregado el bastón a Javier Perales, mientras desde las butacas del público se escuchaba un espontáneo y gracioso “Viva la Virgen de las Viñas y su jarete” que le ha dedicado su hermano Miguel Ángel. Gracias es la palabra que más ha repetido Perales en su intervención. “Llevo muchos años cerca de la Virgen y este reconocimiento me llena de alegría”, ha señalado. El Mayoral ha recordado su etapa de directivo y presidente de la Hermandad, ha tenido un especial recuerdo para Tomás Serna y ha resaltado que “la Virgen ha aparecido siempre en los momentos más importantes de mi vida”.
Tras el precioso pregón musical que ha ofrecido el grupo Virgen de las Viñas con un repertorio que ha incluido un mayo, la Jota del Puchero, una rondeña y una seguidilla, el presidente de la Hermandad, Alejandro Ramírez, ha puesto broche al acto, acordándose del entrañable y servicial, Antonio, que acaba de ser operado. “Nada mejor que la palabra y la música para anunciar nuestra fiesta mariana. Hemos trabajado mucho para que todo esté a punto. Han sido meses de oraciones por varias circunstancias de enfermedades y operaciones. Pero el enorme amor que María nos tiene es más grande que lo que imaginamos y nos permite sobrellevar mucho mejor todas las preocupaciones. Ella ha sido en estos meses la fuente de nuestra luz”.
