Que los tomelloseros siempre se han sentido orgullosos de su lugar de nacimiento, de sus raíces, de sus amigos y de sus familiares es algo que queda fuera de toda duda. Un sentimiento que aflora con mayor fuerza cuando alguno de ellos tiene que poner kilómetros por medio por razones de trabajo.
Y en cualquier lugar del planeta hay tomelloseros que lo demuestran con cualquier gesto o detalle. Por este motivo, la peña los Canuthi ha agradecido la gentileza que ha tenido el Brigada del Ejército y tomellosero por los 4 costados, José Romero Bonillo, que actualmente se encuentra destinado en una misión especial en la Antártida a más de 15.000 kilómetros de distancia.
Hace unas semanas, los responsables de la peña le entregaron la bandera de la peña junto con un ejemplar del Diccionario Tomellosero con el fin de que el humor y el espíritu de estos carnavaleros llegara también hasta el Polo Sur.
En las fotografías que acompañan este artículo también vemos al Ministro de Cultura, Pedro Duque, que ha estado recientemente en la Base Española en la Antártida, visitando a este grupo de militares que están realizando un estudio sobre el medio ambiente en este lejano y enigmático rincón del planeta tierra.
Los Canuthi desean a este tomellosero una enriquecedora estancia por esas tierras y le han dado las gracias en nombre de la Peña y de muchos tomelloseros al poner el nombre de la ciudad en la Antártida. Y el humor Canutthi ha vuelto a aparecer en la frase final que le dedican en las redes sociales. “José, si te cabe en la maleta nos traes un pingüino que nos hace ilusión”. Geniales.
Mientras su bandera ondea en la Antártida, los Canuthi ya preparan con la ilusión de su costumbre su número para el lunes de carnaval. Seguro que volverá a sorprender esta peña que sigue defendiendo a ultranza el carnaval tomellosero y manchego más genuino, el del humor, la parodia, la crítica sarcástica y la imaginación, siempre desde el buen rollo y sin herir sensibilidades. Como ellos suelen decir, “no hay cosa más reconfortante y sana que provocar la risa de los demás”. Y tienen toda la razón.
