El XIII Certamen Nacional de Monólogos “En Tomelloso todos contamos” vivirá este sábado la gran final. En la noche del viernes tuvo lugar la primera jornada y la popularidad del género llevó a un buen número de público a los jardines del Parque de la Constitución, el lugar siempre más agradecido para acoger espectáculos en estas calurosas noches de verano. Y los asistentes pudieron reír con cinco monologuistas que se volcaron en sus interpretaciones, caricaturas, historias y recursos cómicos, cada uno con su estilo y manera, pero siempre desembocando en las carcajadas del respetable que es lo que más agradecen los que se suben a un escenario. Además, la dispar procedencia de los participantes compuso un variado cuadro de humor, no es lo mismo el humor andaluz que el castellano-manchego o el valenciano.
Al certamen le dio empaque un magnífico presentador, Jesús Arenas, genial en todas sus apariciones que se produjeron al inicio, en medio de las actuaciones de los concursantes y cuando el jurado deliberaba. El roblense es una apuesta segura con ese deje manchego que tienen sus puestas en escena y esa capacidad para empatizar con un público que lo conoce y espera con ganas.
A las tablas subieron, el albaceteño, Antonio Moya, con su monólogo titulado “De mal en peor”; el gaditano, Víctor Manuel García Bernabé, con su”Mundo jerezano” y otros tres participantes que eran de Valencia: Jaume González con “Qué gran cantante habría sido si no fuera por la voz”; Mario Mechón con su monólogo “Diferente e indiferente” y Luis Manuel Coll con su tema “Estamos a tope”. Al final no asistió el madrileño, Javier González Traba que había anunciado su presencia con su trabajo “El humorista tranquilo”. El jurado, en el que estaban entre otros, el concejal de Festejos, Manuel Marquina; el monologuista tomellosero, José María Perona “El Jaro”; Ángel Morales Ropero y Pepe Torres, decidió que a la final pasaban Víctor Manuel García, Mario Mechón y Antonio Moya. Los tres lo darán todo esta noche para conseguir el primer premio de 1.500 euros; el segundo se llevará 1.000 y el tercero 500. Gane quien gane, las risas estarán aseguradas con la presencia de un gaditano, un valenciano y un castellano-manchego. Los tres han conseguido medalla, hace falta saber el color de la que se colgará cada uno.