Vecinos del Barrio San Juan se han manifestado este miércoles en la plaza de España para pedir soluciones ante una realidad que consideran “insostenible”. Más de doscientas personas se han concentrado, entre vecinos del barrio y personas de otros sectores y colectivos de la ciudad que les han apoyado. Entre los asistentes se ha visto a los seis concejales del Grupo Popular con su portavoz, Javier Navarro, a la cabeza y a los dos de Vox, Ana Valero y Luis Miguel Valero.
Directivos del barrio han ido repartiendo un manifiesto en el que han expresado estar cansados “de tener un parque cada vez más degradado socialmente, con falta de cuidados y un mantenimiento cada vez más afectado por la población que lo frecuenta, de una forma insalubre y con conductas peligrosas para el resto”.
Los vecinos han denunciado que existen focos de venta de droga, prostitución, delicuencia y violencia “como la que ocurrió ayer con arma blanca”.
“Estamos cansados de ser la peor zona de Tomelloso y queremos soluciones ya. Los políticos se pueden pasear por la zona y comprobar ellos mismos la realidad”, indicaba también el manifiesto.
Al final han pedido poder salir a la calle “sin sentirnos intimidados y que nuestros hijos no sientan miedo. Queremos que la ley se cumpla y ¡quién no sepa convivir que se vaya a otro sitio”.
Los mensajes que aparecían en las pancartas que portaban los vecinos iban muy en consonancia con los argumentos del manifiesto. “Por un barrio de San Juan sin conflictos”, “queremos más vigilancia”, “Pedimos un barrio tranquilo para vivir”, “No queremos que nuestros hijos tengan miedo”, “Más tranquilidad y seguridad”, son algunos de los que se han podido ver.
El presidente del barrio, Josué Benavente, ha incidido en los mismos argumentos. “Hemos venido a expresar el descontento y la preocupación que tenemos todos los vecinos que lo único que queremos es vivir en paz como cualquier ciudadano de Tomelloso o de España. Tenemos miedo y todo está muy relacionado con el tema de la ocupación ilegal y con algunas personas que no saben convivir”, ha señalado.
Benavente ha lamentado que haya casas que sigan ocupadas desde hace años, “a pesar de que venimos denunciando el problema ante el Ayuntamiento y en los medios de comunicación. Ahora han montado un dispositivo de vigilancia que va a estar un mes, pero al mes siguiente ¿qué vamos a hacer?”.
El presidente del barrio ha explicado que el Ayuntamiento les transmite que está de su parte y que trabajará para normalizar la vida en el barrio, “pero queremos medidas y acciones concretas para poder vivir en paz, sin miedo y en un lugar en el que no haya ni prostitución, ni tráfico de drogas, ni peleas. Al Gobierno central le pedimos que cambie la legislación de las viviendas ocupadas ilegalmente porque así no podemos seguir”.
Por su parte, un vecino extranjero que lleva un tiempo viviendo en el barrio ha denunciado la dramática situación del último mes “con las peleas y la droga que hacen imposible vivir y siempre tienes el miedo de que un okupa pueda entrar en tu casa”. Al final los asistentes, han irrumpido en un gran aplauso y han pronunciado gritos de “¡basta ya!”.
