Diez años han pasado ya del nacimiento de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Una década de lucha, de mucho esfuerzo en la pelea por el derecho a la vivienda, en la que han conseguido logros importantes. Pero detrás de lo conseguido hay todavía muchos problemas que solucionar y males que se reproducen.
Esta mañana miembros de la PAH y la Plataforma de los Pensionistas se han concentrado en la plaza de España de Tomelloso. Con ellos han estado el concejal de IU en el Ayuntamiento de Tomelloso, Rafael Quesada; la portavoz de la misma formación en Argamasilla, Esther Trujillo y el que fuera coordinador general de IU, Cayo Lara. Sus dirigentes han dado lectura a un manifiesto, y han puesto buena cara al mal tiempo, poniendo música y humor a sus reivindicaciones. “¡Hola Liberbank!, ¡Hola Santander! ¿Se quedó usted con mi casa? Con su casa me quedé ¿Y que hizo con la deuda? Al Estado la pasé. ¡Muy bien Liberbank! ¡Muy bien Santander!”
Desde la PAH se celebra que se hayan paralizado cientos de miles de desahucios, que se hayan encontrado soluciones para las familias, “que nos decían que eran imposibles como daciones, restructuraciones, condonaciones. Hemos garantizado una alternativa habitacional a más familias que la propia administración pública, hemos presentado leyes autonómicas en diferentes territorios del Estado español para proteger el derecho a la vivienda, hemos presentado una Ley de Vivienda en el Congreso y hemos logrado que numerosos organismos e instituciones internacionales respalden nuestras demandas”.
Sin embargo, y a pesar de estos importantes logros, en la PAH consideran que una década después no hay mucho que celebrar. “Estamos asistiendo a una nueva burbuja relacionada con los alquileres, el año pasado se produjeron más desahucios que en cualquier año de la mal llamada crisis económica, el mayor casero del país es un fondo buitre, las familias que se enfrentan a procesos de desahucio no encuentran interlocutores para negociar porque todas las propiedades de los bancos han sido malvendidas a los fondos buitre o fondos de inversión que solo quieren estas viviendas para especular con ellas, miles de familias corren el riesgo de verse en la calle o sufren los rigores de la pobreza energética, el poder judicial se ha posicionado descaradamente del lado de la banca y seguimos siendo el país de la Unión Europea que menos vivienda pública tiene”.
Pero a pesar del desolador panorama, en la PAH no pierden la esperanza “de que algún día cambien las leyes y no tengamos esta indefensión, de que la banca no campe a sus anchas o, simplemente que lo importante sean las personas”. Desde la Plataforma se asegura que “tenemos cuerda para aguantar, por lo menos, otros diez años. Nos seguiremos enfrentando a bancos, jueces y políticos. Seguiremos haciendo un trabajo, que en muchos casos se debería hacer desde la administración y no pararemos hasta lograr que las generaciones futuras de nuestro país tengan garantizado el derecho a techo”.
“Las pensiones se defienden”
En el acto también ha habido hueco para las reivindicaciones de la Plataforma de Pensionistas que se han desarrollado bajo el lema, “gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden”. La Plataforma ha expresado su intención de luchar “contra unas pensiones de miseria” y han pedido una subida del 22 por ciento, al igual que ha ocurrido con el salario mínimo interprofesional. Sus dirigentes se ha reafirmado en la defensa del sistema público de pensiones y que estén garantizadas en los Presupuestos Generales del Estado, además de expresar su rotundo rechazo a la normativa sobre pensiones privadas que ha esbozado la Comisión Europea, a los planes privados de empresa y a las desgravaciones fiscales de este tipo de pensiones.
