De las muchas cosas que se echaron de menos en pandemia, una fue la Gala del Voluntariado que ayer, coincidiendo con el Día Internacional del Voluntariado, retornó felizmente con un entrañable acto en la Biblioteca Francisco García Pavón. Los emotivos mensajes y discursos que se escucharon, mezclaron con las maravillosas canciones que interpretaron Víctor y Agustín Pradillos. El salón se llenó por completo para agasajar a cinco ejemplos de voluntariado , compromiso socialy solidaridad con los demás: Juan Carlos Escuderó, de CERES; Emiliano Valero, de ARBA; el proyecto “Mi casa, una vida en comunidad” que se desarrolla en AFAS; Aurelio Moreno, de Black Lab Tattoo y Encarna Morales. de Cruz Roja. Todos se llevaron un precioso recuerso confeccionado por los integrantes de Cadisla y una flor de Pascua.
Las aplausos y reconocimientos comenzaron ya con Juan Carlos Escudero, voluntario de Ceres, todo un ejemplo de solidaridad y compromiso con los demás que estuvo acompañado por trabajadores y otros voluntarios que trabajan en la entidad que preside Toñi Valverde.
Emiliano Valero, premio al voluntariado ecológico, hizo un precioso alegato “para que dejemos a las futuras generaciones el planeta más amable posible. En ARBA hay un grupo extraordinario de personas, además de los voluntarios que se han sumado para restaurar entornos degradados y ser útiles a la sociedad sin esperar nada a cambio”. Valero consideró un referente al gran Félix Rodríguez de la Fuente y pidió apoyo a la administración. “Somos los voluntariados más odiados porque circulan injustas y terribles leyendas sobre nosotros, pero seguiremos adelante con nuestra labor”-
Luis Ballesteros, todo un baluarte en AFAS, resumió la labor del voluntario en una frase: “Preocuparse por las personas, simplemente. Tenían que ser declarados especie protegida”. Tras recordar con emoción a Miguel Ángel Blázquez agradeció el Ayuntamiento el enfoque más ambicioso que se le ha dada a la Gala y elogio el proyecto “Mi casa, una vida en comunidad”.
El acto avanzaba y sonaban deliciosas canciones como “A tu lado”, “La calle Melancolía” “Lady Madrid” o “No hay problema”. Así, le llegó el turno a Aurelio Moreno, que agradeció el reconocimiento en medio de otra gran ovación del auditorio.L a última en subir al estrado sería otra mujer luchadora y comprometida con los más desfavorecidos, Encarna Morales. “De bien nacidos es ser agradecidos y agradezco mucho este premio. Lo quiero compartir con los voluntarios de Cruz Roja y todos esos voluntarios de Tomelloso que emplean parte de su tiempo en darlo todo por los demás. Quien es voluntario lo es para toda la vida”, terminó diciendo.
Cerraría la Gala, Inmaculada Jiménez, manifestando que “hemos podido volver a celebrar un acto muy necesario e importante para Tomelloso. Los voluntarios son un ejemplo de generosidad que siempre reciben mucho más de lo quedan. Me siento muy orgullosa del empuje del voluntariado de nuestra ciudad y de esa labor impagable que realizan”. La alcaldesa terminó citando a Gandhi “sé tú el cambio que quieres ver en el mundo”.