Hoy tendría que haber ofrecido el pregón de la Romería de la Virgen de las Viñas, Carlos Montañés. El periodista del grupo Surco, un todo-terreno de la información, trabajador y buena persona, asegura que recibió el encargo con sensaciones encontradas. «Cuando la junta directiva de la Hermandad me propuso que hiciese el pregón de la Romería, acepté con una mezcla de temor, responsabilidad y alegría. Temor y responsabilidad porque hablamos de una fiesta que la gente vive con mucha devoción y sentimiento y lo quieres hacer bien; pero también alegría y agradecimiento porque hayan pensado en mí para un acto importante que marca el inicio de la Romería».
Montañés, que ha contado muchas Romerías, afirma que «todo lo relacionado con la Virgen de las Viñas me provoca mucha emoción. Mi acercamiento a la Patrona, y por tanto a la Romería, fue gracias a mi mujer y mis hijos. Ellos me fueron metiendo en esta vorágine romera de la que ya no he salido nunca. Por eso es muy emotivo para mí».
Cuando a Carlos Montañés le dijeron que iba a dar el pregón aún quedaba tiempo para el último fin de semana de abril, «pero empecé pronto a darle vueltas, buscando una idea o esbozo que me sirviera de hilo conductor. Algunas veces empezaba a escribir y me quedaba en el buenas noches…pero bromas aparte tengo claro que el pregón había sido un relato de mi experiencia con la Romería y la Patrona desde ese acercamiento por la familia que te contaba antes».
Ahora el pregón tendrá que esperar un año. «Si cuentan conmigo, pondré todo mi empeño y esfuerzo para hacerlo lo mejor posible». Los que conocemos a Carlos Montañés estamos seguros de que así será