Seguir la tradición manchega le ha hecho fuerte en Torre de Juan Abad, un pueblecito del Campo de Montiel. José Antonio Medina afirma que su proyecto “nunca tendría sentido en Madrid”, la ubicación no la cambia por nada del mundo. Originario de la vecina Puebla del Príncipe, donde sus padres fundaron una casa de comidas, está al frente de El Coto de Quevedo, uno de los dos restaurantes con estrella Michelín de la provincia.
Un estofado de perdiz roja con pimentón, azafrán, otras especias, y al final escabechada, es uno de los platos que hoy triunfan en su carta. La cocina de Medina es capaz de transmitir esa pasión que tiene por el mundo rural. A nivel profesional dice que no necesita más que permanecer donde está. “Entre semana hay que reconocer que estar aquí es muy duro, pero los sábados y domingos no tenemos sitio para tanta demanda”, explica.




Feliz con lo que han conseguido él y su equipo, con todos sus logros, tantos que a veces le abruman, José Antonio Medina no solo ha obtenido una estrella Michelin para su espacio gastronómico Evolución, sino que, además, ha logrado que la sección más tradicional del restaurante, Origen, se cuele también entre las recomendaciones de la Guía Michelín. En España “no hay tantos establecimientos que lo tengan”, reconoce.
Un desayuno para afrontar el día

En su recorrido por las mejores opciones gastronómicas de la provincia, el chef no duda en comenzar el día en una churrería. “En Valdepeñas, tenía mucho cariño a la churrería Veracruz, a la que he acudido desde la niñez, pero cerró”, cuenta. Ahora, cualquier opción de la ciudad del vino, de Villanueva de los Infantes u otro pueblo es una buena elección. Su hijo Mateo, con 5 años, es un enamorado de los churros, así que no dudan en ir en familia a comer unas porras con chocolate o café con leche.
De cañas o vinos

A la hora del aperitivo, Medina se dirige a la zona centro de la capital para hacer una ruta. Su opción es empezar en La Peseta, con unos embutidos como tapa, y seguir en La Soga, un lugar perfecto “para comer cuchara: sopa de ajo, potaje, algún guisito”. “La cuchara es increíble”, añade. Para terminar, acude al Miami Gastro, “excepcional para picotear”: la minihamburguesa de ciervo está entre sus preferidas.
El vino lleva la delantera en su paladar a la cerveza. A José Antonio Medina le gusta mucho el Dehesa del Carrizal (Navas de Estena), Pago Florentino (Malagón), Corrales (Valdepeñas) y Montalvo Wilmot (Argamasilla de Alba). “Realmente hoy en día somos afortunados en Castilla-La Mancha, porque para mí estamos en la Champions del vino. Tenemos opciones muy buenas”, señala. Su menú ‘Raíces’ incluye un maridaje íntegro de Castilla-La Mancha y el 80 por ciento son de la provincia.
Una buena comida

Para comer, José Antonio Medina coge de nuevo el coche y da con sus pies en La Rabiosa de Alcázar de San Juan, donde “Juan y Álex, lo están haciendo muy bien”. Su menú, de cocina mediterránea y fusión, es toda una delicia. El chef recomienda las croquetas, la tarta de queso y disfrutar de los platos de temporada. Hace poco comió una berenjena con queso burrata “espectacular”.
Merienda o café
Fan del helado, José Antonio Medina no pasa por alto Helados Romero de Puertollano, “el número uno de Castilla-La mancha y uno de los mejores de España”. Sin duda, es uno de los más recomendados entre los chefs de la provincia, aunque Medina también reconoce su pasión por el helado de nata en Los Valencianos de Valdepeñas. “Los heladeros de la zona de Alicante son los mejores elaborando nata, vainilla y turrón, son los grandes artesanos del helado tradicional”, explica.
Cenar a la luz de la luna

Otra opción que se repite: la terraza de Las Musas de Campo de Criptana. José Antonio Medina dice que es un lugar con “magia”, por algo la Sierra de los Molinos, donde está ubicada, inspiró al mayor literato que han dado las letras españolas, Miguel de Cervantes. Para el chef es un lugar donde pedir un buen espumoso manchego y probar algunos platos típicos, como el pisto, las migas, el cordero. En agosto además organizan una fiesta de los años 60 que es “mítica”. Otra opción de terraza sería acudir a cualquiera de la plaza Mayor de Villanueva de los Infantes.
Trasnochar
Y para cerrar la jornada, José Antonio Medina acude al pub Totem, de su amigo José, en La Solana. El chef es aficionado al gin tonic, sin florituras, Seagram’s con tónica Schweppes. Le gustan otras, pero esa marca es la que más le convence. Si tuviera que tomar un gin tonic todos los domingos, se tomaría el “clásico”.