Acaba de conseguir una estrella Michelín. Javier Aranda está orgulloso por este reconocimiento que lo es, también, a la cocina manchega, a sus productos de temporada, a su materia prima.
El brillo de las estrellas de la alta gastronomía ha llegado por primera vez a Ciudad Real, en concreto a Torrenueva, a su restaurante Retama, nombre que hace honor a ese arbusto amarillo muy frecuente en La Mancha, en el hotel de cinco estrellas La Caminera Club de Campo, donde el prestigioso chef quiso volver a sus raíces manchegas.
Un año de la puesta en marcha de Retama
Aranda, en declaraciones a Lanzadigital, ha recordado que hace ahora un año que se embarcó en este nuevo proyecto, junto a un magnífico equipo de profesionales a los que agradece su trabajo, él ejerce de chef ejecutivo, “y la estrella Michelín confirma que estamos trabajando en la buena dirección”, indica.
Añade que en su restaurante Retama quiere rendir un vanguardista homenaje a la cocina manchega y a los productos de la tierra. “Hacemos una cocina ligada a la tradición manchega, al sabor, a ese recetario reinventado”, explica el joven chef toledano que ya fue galardonado con dos estrellas Michelín en sus restaurantes de Madrid, La Cabra y Gaytán.
Alta gastronomía en pleno campo de Ciudad Real
Aranda reconoce que el haber logrado la estrella Michelín en Retama atraerá, ahora, a mucho más público hasta su restaurante del hotel La Caminera, donde la sofisticación y la alta gastronomía se dan la mano en pleno campo de Ciudad Real.
Preguntado sobre qué plato no hay que dejar de probar en nuestra visita a Retama, nos comenta dos: un ajo verde de pistacho con anguila ahumada y ajo negro y el huevo con migas. Así sin más. Con nombre propio tradicional pero que sorprende por su vanguardia.
Una carta de temporada
Además, en la carta de temporada se pueden encontrar, como entrantes, trucha ahumada con espuma de zanahoria, cítricos y huevitos curados; pulpo asado con patata del terreno y maíz rostizado; morteruelo con maíz y garbanzos o unos tortellini de perdiz escabechada, salsa de queso manchego y praliné de nuez.
De los segundos sobresalen el rodaballo con gazpachuelo de pollo amarillo y gel de Jerez; la paletilla de cordero lechal con chutney de tomate especiado, espinacas baby y piñones; el lomo de ciervo con cuscús y dátiles o el pichón de Bresse con su parfait y su muslo confitado.
Completan la oferta dos menús degustación: Tradición by Javier Aranda (60 € por persona con suplemento de maridaje de vinos por 30 € por persona) y Retama by Javier Aranda (90 € por persona con suplemento de maridaje de vinos por 45 € por persona).
Una experiencia inolvidable, con identidad propia
Según la biografía de Javier Aranda en la web del restaurante, se trata del encargado de construir una propuesta gastronómica “donde modernidad y tradición, técnica y pasión se unen para lograr una experiencia inolvidable con identidad propia para el disfrute de los cinco sentidos”.
Nacido en Villacañas (Toledo) en el seno de una familia de tradición hostelera. Cocinero de cuna y chef precoz, con tan sólo 25 años de edad recibió el galardón de Cocinero Revelación, premio otorgado por Madrid Fusión.
A los 29 años se convirtió en el chef más joven del mundo en conseguir una Estrella Michelin en cada uno de sus restaurantes, La Cabra y Gaytán, si bien el pasado año la perdió en La Cabra.
La cocina de Javier Aranda destaca por tener una identidad propia. Se define como “un embajador del producto español”, un abanderado de la cocina responsable. Mezcla de texturas y sabores únicos donde el producto es el protagonista para crear una cuidada cocina de autor.
