El paso del ciclón “Idai” por el sureste de África (Mozambique, Zimbabue y Malawi) ha devastado territorios enteros de estos tres países. La zona más afectada ha sido la costa y el centro de Mozambique. Cáritas Mozambique alerta del tremendo impacto en cuanto a pérdidas humanas y materiales, causadas por el ciclón “Idai” el pasado 14 de marzo en buena parte del país y que supone la mayor catástrofe registrada en las últimas décadas.
Cáritas Española ha transmitido su solidaridad a Cáritas Mozambique, además de ofrecer la máxima colaboración en los planes de emergencia que se vayan articulando, en coordinación con la red de Cáritas Internationalis y con la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECID).
Cáritas Valdepeñas se suma a la colaboración de tres formas diferentes: enviando los fondos recogidos en las colectas del primer fin de semana de abril, de todas las parroquias; tiene abierta una cuenta solidaria con los damnificados, a la que será posible hacer aportaciones a través del número CCM (LIBERBANK) ES63 2105 5038 88 3400008081; y también se puede colaborar a través de los donativos depositados de forma anónima en el buzón solidario de su sede, sita en la C/ Unión 15, o en cada parroquia. “Súmate, sé solidario, haz tu donativo”.
La castástrofe
La destrucción ha sido devastadora en muchas regiones debido a la serie de lluvias torrenciales y vientos huracanados que han estado azotando entre octubre de 2018 y marzo las provincias del centro y norte de Mozambique, y que habrían afectado seriamente a más de 13.000 familias. Los efectos del ciclón han afectado también al vecino Zimbabue.
“Es una catástrofe humanitaria en toda regla y la cifra oficial de muertos irá aumentando a medida que se acceda a las zonas a las que no se ha podido llegar”. Así lo resumen todas las organizaciones humanitarias que se encuentran en Mozambique. “Hay zonas donde no hay agua potable ni electricidad, hay muchas carreteras cortadas, no funcionan los transportes, los colegios están cerrados, la comunicación es ocasional y deficiente, el precio de los alimentos ha subido un 600% y los servicios sanitarios han colapsado”.
Las cifras de la magnitud de esta tragedia se quedan obsoletas en cuestión de horas. Se calcula que hay 1,8 millones de personas afectadas.
Mientras continúan los trabajos de rescate en aquellas zonas a las que se puede acceder, numerosas localidades de Mozambique y Zimbabue continúan incomunicadas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido del alto riesgo de que se produzcan epidemias de enfermedades infecciosas como cólera, tifus o sarampión en todo el sudeste africano, especialmente en Mozambique. Los albergues temporales donde se cobijan los damnificados son precarios, sin o poco acceso a servicios de saneamiento básico y de agua potable, lo que multiplica las posibilidades de que aparezcan casos de cólera y de otras enfermedades.
“A lo largo de los próximos meses seremos testigos del desplazamiento de cientos de miles de personas cuyos medios de vida han sido literalmente borrados del mapa por el ciclón Idai. Estos desplazados pertenecen a una categoría que algunos analistas han bautizado como migrantes de supervivencia: personas que se ven forzadas a abandonar sus lugares de origen –cruzando una frontera, en algunos casos– pero que no encajan en ninguno de los rígidos supuestos legales que permiten a un ciudadano solicitar protección dentro o fuera de su país”.
Solidaridad de Cáritas
Cáritas Española ha llevado a cabo en la última década un intenso trabajo de cooperación fraterna con la Cáritas de ese país africano, donde ha apoyado numerosos proyectos de desarrollo en ámbitos de sostenibilidad alimentaria, educación, salud, respuesta a emergencias y lucha contra el tráfico de personas, entre otros.
Asimismo, ha abierto la campaña “Cáritas con Mozambique” para canalizar la solidaridad de los donantes privados españoles, con esta emergencia