La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha iniciado este martes el juicio, a puerta cerrada, contra un hombre de Valdepeñas, acusado de violar a una joven en su domicilio tras conocerla en un salón de juegos de la ciudad vinatera. El acusado, en prisión preventiva desde el momento de la denuncia, ha señalado que la relación sexual fue consentida.
El abogado de la joven, Francisco Javier Martínez, ha indicado a los medios de comunicación tras la primera sesión del juicio que el acusado tan solo ha respondido a las preguntas de su letrado, en las que ha dejado claro que la relación sexual que mantuvo en su domicilio con la joven valdepeñera fue consentida, algo que para Martínez «no se sostiene por ningún sitio a la vista de las evidencias que hay», en referencia al atestado policial que los propios agentes de la Policía Nacional han ratificado en el juicio de este martes.
En esta primera sesión del juicio han declarado el acusado, la víctima, la madre de la víctima y los agentes de la Policía Nacional. Durante la declaración de la víctima, la joven ha tenido que salir unos minutos de la sala al encontrarse «indispuesta», según su abogado, para seguir declarando posteriormente.
Escrito de acusación
El escrito de acusación recoge que la joven conoció al acusado, que estaba con dos amigos, en el interior de un salón de juegos de Valdepeñas a primera hora de la tarde. Unas horas después decidieron ir todos juntos al domicilio del acusado, en el que consumieron alcohol y drogas. Tras marchase los dos amigos del acusado, éste intentó mantener relaciones sexuales con la joven en el sofá, sin conseguirlo, mientras ella le manifestaba «abiertamente su negativa y oposición», añade el escrito.
Posteriormente, cuando se encontraban en uno de los dormitorios del acusado, este persistió «en su inicial ánimo libidinoso y a fin de satisfacer su deseo sexual» y volvió a intentar mantener relaciones con ella. Ante la nueva negativa, el escrito describe que la cogió fuertemente del cuello y la tiró sobre la cama, tapándole la boca para que no gritara y la forzó a mantener relaciones «con gran virulencia y agresividad».
Como consecuencia, la joven presentó numerosas lesiones físicas y síntomas compatibles con trastorno de ansiedad, ánimo depresivo y trastorno de estrés postraumático. Una circunstancia que, según recoge la Fiscalía en su escrito, conlleva «importantes inadaptaciones en los distintos ámbitos de su vida (personal, social, de pareja y de ocio y tiempo libre)», Además de una serie de consecuencias en distintos niveles como cognitivo, tales como ansiedad, ánimo depresivo, baja autoestima y sentimientos de culpabilidad. También psicosomático, como problemas digestivos y temblores y finalmente a nivel social, tales como desconfianza, conductas de aislamiento y evitación.
Fiscalía pide 14 años de prisión y la acusación 15
La Fiscalía pide para el acusado una pena de 14 años de prisión por un presunto delito de agresión sexual, además de la prohibición de acercarse o comunicarse con la joven a una distancia de 200 metros por un periodo de tiempo de 15 años e indemnizaciones de 22.900 euros por las lesiones temporales, 9.075 euros por las secuelas y 65.000 euros por perjuicio moral grave por pérdida de calidad de vida originada por las secuelas.
Por su parte, el abogado de la joven ha elevado su petición de pena de cárcel hasta los 15 años al considerar que existen dos agravantes: el trato vejatorio al que fue sometida su clienta y el «uso de instrumentos» en la violación.
El abogado de la defensa y la fiscal han rechazado hacer declaraciones a los medios de comunicación al término de la primera sesión de este juicio, que se reanudará mañana miércoles en la Audiencia Provincial de Ciudad Real.