El presidente de la Denominación de Origen Valdepeñas, Jesús Martín, también alcalde de la ciudad, ha declarado este miércoles respecto a “las luchas que tienen dos empresas, que son dos gigantes, que se las arreglen entre ellos”. “En riñas de hermanos, que nadie meta la mano”. “A mí, mientras no afecte a la imagen de la ciudad ni al consejo regulador, el que no quiera que le llamen cojo, si cojo no es, que ande derecho. Pero eso no es trabajo del consejo regulador. El consejo regulador debe velar por la trazabilidad de los vinos y lo hace”.
Martín ha remitido a una rueda de prensa que dará el lunes a las 18 horas en la sede de la DO Valdepeñas para obtener más datos sobre la situación actual de la denominación de origen, después de que el sector productor de la DO, integrado por las organizaciones profesionales agrarias ASAJA, COAG, UPA y por Cooperativas Agro-alimentarias, anunciara su intención de causar baja en la Junta Directiva de la DO Valdepeñas, “ante la imposibilidad de poder cambiar el rumbo y el funcionamiento de la misma que, durante los últimos años, se ha visto sometida a una paralización casi total de su capacidad de gestión por la “guerra comercial” abierta entre las principales empresas que conforman dos de sus principales asociaciones de la rama comercializadora (ASEVIVALDEPEÑAS Y AVIVAL); enfrentamiento que ha subido de intensidad en los últimos meses con numerosos reproches y denuncias cruzadas entre los mismos operadores acusándose recíprocamente de graves irregularidades en la comercialización de los vinos, en especial, en el etiquetado identificativo de la calidad del vino conforme a las normas contenidas en el pliego de condiciones para los vinos con Denominación de Origen Valdepeñas”.
Los productores indicaban que han sido las propias denuncias cruzadas entre las principales empresas comercializadoras las que les llevaron a verse ellos en la obligación de poner estos hechos en conocimiento de las autoridades regionales competentes en materia de control y certificación de los vinos sujetos a la denominación de origen, que han desembocado en diversos expedientes sancionadores y, ante la propia Fiscalía de la Audiencia Provincial de Ciudad Real, que acordó que continuaran las investigaciones ante la Audiencia Nacional.
Cambios en los estatutos
Además, el sector productor ha intentado promover numerosas medidas y acuerdos dentro de la Junta Directiva para revertir esta situación y garantizar tanto la calidad como la trazabilidad de sus vinos frente al consumidor, pero sin obtener resultado alguno, según indica, “dada la configuración de mayorías prevista en los Estatutos de la Interprofesional y la actual distribución de votos entre las dos ramas que conforman su Junta Directiva, que asegura un “derecho de veto” a favor de una de las asociaciones que componen la rama comercializadora que impiden el funcionamiento democrático de dicho órgano, limitando totalmente la capacidad de gestión al no poder adoptarse ningún acuerdo que implique cambios sustanciales en el devenir de las cosas y que ayuden a corregir el presunto fraude que, entendemos, se está causando al consumidor”.
El sector productor ha exigido que se tomen medidas urgentes para que las presuntas irregularidades no se extiendan más en el tiempo y para ello exigía cambios en los estatutos que permitan desbloquear la situación y recuperar la capacidad de gestión de la junta directiva, de manera que, en el caso de que el próximo día 24 de julio no se hayan producido los cambios exigidos, se verían obligados a solicitar en dicha fecha la baja definitiva en la Asociación Interprofesional, que quedaría sin representación del sector productor.
Petición de control en la normativa y tutelaje a la Consejería
De la misma manera, instaban a la Consejería de Agricultura, que es quien tiene las competencias en el control y la certificación de los vinos, a que igualmente adoptara las medidas oportunas para garantizar que las industrias cumplen con la normativa y disponen de las instalaciones necesarias y suficientes para la certificación de la aptitud de sus vinos y el uso de las contraetiquetas; tutelando y/o asumiendo la gestión de la Interprofesional en el caso de que no se garantice su normal funcionamiento a futuro.
En definitiva, el sector productor considera que no puede seguir siendo mero observador de lo que está ocurriendo en la DO, sin capacidad alguna de poder cambiar las cosas y sin que exista la transparencia mínima exigible.
Consejería de Agricultura
Por su parte, el consejero de Agricultura, Agua, y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, tras este nuevo conflicto surgido en el seno de la Denominación de Origen Valdepeñas, aseguró el martes que trabaja de la mano de los productores y de las bodegas para resolver las “dificultades” que atraviesa esta marca de calidad, a fin de que la vendimia, ya inminente, transcurra con “normalidad”.
“Como en años anteriores, y teniendo en cuenta el incremento espectacular de las ventas de vino embotellado, especialmente de la DO de ‘Valdepeñas’ en el mercado nacional, creemos que va a ser necesario usar el pliego de condiciones que permite el incremento del rendimiento productivo lo que va a beneficiar a los viticultores”, indicó el consejero, preguntado antes de reunirse por videoconferencia con la Asociación de Regiones Europeas Vitícolas por los problemas en esta DO, en la que los productores amenazan con salir de ella si persiste la guerra entre los comercializadores Félix Solís y García Carrión.
“Estoy convencido de que los viticultores, las asociaciones profesionales agrarias y las bodegas van a ser capaces de ponerse de acuerdo de manera inminente”, insistió el titular castellanomanchego de Agricultura, que recordó que la Consejería tutela a todos los consejos reguladores en la región y controla a las empresas certificadoras que, a su vez, dan veracidad a los productos que se venden con la etiqueta, en este caso, de la DO Valdepeñas.
“Siempre hemos hecho todo lo posible por trabajar con los viticultores y las bodegas para que esta DO avanzara y creo que podemos estar muy satisfechos del trabajo realizado en los últimos años, que nos ha permitido llegar a una situación que es bastante mejor a la que se tenía en 2015”, añadió el consejero, que recordó que la contraetiqueta de estos vinos contiene mucha más información de la que se tenía antes.
“Es la única Denominación de Origen en España cuya tirilla del Consejo Regulador incluye las variedades blancas a partir de la que se ha elaborado el vino blanco. También desde este año es obligatorio incluir en la contraetiqueta la palabra crianza, si ese ha sido el método de elaboración del vino”, explicó Martínez Arroyo, que añadió que “en un esfuerzo de transparencia”, también se va a hacer con el reserva y gran reserva.
García Carrión y Félix Solís, posturas enfrentadas
García Carrión (AVIVAL, Asociación de Elaboradores de Vino con Denominación de Origen Valdepeñas), envió un comunicado en el que explicaba que no asistió a la pasada reunión de la Junta Directiva de la Asociación Interprofesional de la Denominación de Origen Valdepeñas, convocada para el 12 de junio, haciendo así público su apoyo a todas las asociaciones agrarias, que manifestaron su intención de no asistir a dicha reunión. Asimismo, AVIVAL manifestó su adhesión al comunicado de ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agroalimentarias ante “el bloqueo existente en la Junta Directiva de la DO”.
García Carrión dijo que “la actual situación de la DO Valdepeñas no se debe a una guerra comercial entre Félix Solís (ASEVIVALDEPEÑAS, Asociación Comarcal de Empresarios Vitivinícolas de las Zonas de Producción y Crianza de la Denominación de Origen Valdepeñas) y García Carrión (AVIVAL)” e indicó que, no solo se suma al sector productor, sino que, además, ha impugnado judicialmente los estatutos de la DO Valdepeñas “por ser antidemocráticos y permitir a Félix Solís (ASEVIVALDEPEÑAS) vetar todas las medidas de transparencia que se han propuesto en el seno de la denominación de origen contra el fraude denunciado”
Por su parte, Félix Solís S. L. envió otro comunicado indicando que ve “hipócritas” las declaraciones del grupo J. García Carrión sobre la situación de la Denominación de Valdepeñas. Señalaba que García Carrión se opone reiteradamente ante el Consejo Regulador a que se haga la trazabilidad de sus vinos y que sus acusaciones responden “a una “descarada” ofensiva comercial y de competencia desleal, como ya hiciera en el pasado contra otras marcas reputadas”.
La compañía Félix Solís S. L. manifestó sobre la composición de la Interprofesional del Consejo Regulador de la DO, que “los votos se dividen a partes iguales entre productores (asociaciones agrarias) y bodegas, con un 50% de votos cada una de las dos partes. Cualquier acuerdo requiere tres cuartas partes de votos, según sus Estatutos Sociales, que fueron aprobados por unanimidad. Es un sistema de aprobación que busca crear consensos y responde al modelo del resto de Interprofesionales”.
Añadía que, ya está en vigor el contraetiquetado específico para los crianza de toda la denominación, entrando en vigor para los reserva en el año 2021 y en previsión para el 2023 los gran reserva, algo que ratificó la Junta Directiva y Asamblea General de la Interprofesional.
Desde Félix Solís S. L., recordaban que, “en un afán de transparencia, Félix Solís S.L ha sido una de las bodegas que, a través de la asociación ASEVIVALDEPEÑAS, ha pedido ya al Consejo Regulador hasta en cuatro ocasiones la contratación de una empresa especializada que efectúe análisis de trazabilidad para que pueda conocerse la equivalencia entre vino “criado” según el parque de barricas y ventas reales, que ponga a cada operador en su lugar. Destacaba que Bodegas Vinartis SA (grupo J. García Carrión) se ha opuesto de forma sistemática a la contratación de ninguna empresa especializada independiente para ese análisis.