El Viña Albali Valdepeñas quiere seguir haciendo historia. Todos los vecinos y vecinas de la localidad ya lo saben y, posiblemente, también los de toda la provincia, pero hay repetirlo por si hay algún despistado: el equipo está a un solo partido de meterse por segundo año consecutivo en la final por el título de Liga y de conseguir la clasificación para la Champions de la próxima temporada. El sueño sigue muy vigente y ojalá pueda cumplirse en esos 40 minutos (o más con prórroga) que le quedan a la semifinal. Porque todos queremos seguir soñando todavía más con este equipo de David Ramos.
Para ello habrá que ganar al Levante este domingo en Paterna, en el tercer y definitivo encuentro (21 horas, televisado por GOL). Todo se jugará a una carta, después de que los valencianos ganaran el primer duelo del pasado sábado (6-3) y el Viña Albali empatara la eliminatoria venciendo el miércoles en casa en la tanda de penaltis (1-1).
Nada más finalizar ese segundo envite, las mentes se pusieron en esta histórica cita que le viene de nuevo este domingo al Valdepeñas. Y el técnico David Ramos daba ya las consignas a seguir para tratar de conseguir esa deseada victoria: «Debemos regular las decisiones. Tenemos el ejemplo de cómo perdimos allí y por qué. El partido va a ser muy duro, ellos van a apretar mucho. Tenemos que tener cuerpo, presencia, confianza, mirar a la cara al rival y entender que vamos a tener nuestras opciones. Cada momento hay que estrujarlo al máximo, porque puede ser determinante en cada situación», decía un convencido entrenador.
Ya no hay que mirar atrás, hacia un pasado reciente que dice que el Viña Albali Valdepeñas ha perdido sus tres encuentros de la presente temporada en la pista del Levante. Cayó en la primera vuelta de la liga por 4-1, en la ronda de cuartos de la Copa del Rey (8-1) y en ese primer encuentro de semifinales (6-3). Ahora es un borrón y cuenta nueva, «porque este será el partido decisivo de la semifinal, y la cosa cambia mucho», se apunta por el vestuario azulón, que ha olvidado totalmente que no se gana fuera desde octubre.
Tampoco hay lamentos con respecto a las lesiones y a los problemas físicos. Y eso que hay muchos e importantes. A la baja de larga duración de Xavi Cols, podrían unirse Álex García y Sergio González, que son dudas después de no acabar el segundo choque por sendas lesiones. Otra baja segura será la de Cainan, sancionado con tres partidos después de su rigurosa expulsión del miércoles. Al menos, Rafael Rato y José Ruiz van mejorando y teniendo más minutos para ayudar al equipo, gracias a ese carácter competitivo que tienen.
Esos problemas ya ni se miran. Es más, parecen unir y fortalecer al grupo y a esos jugadores llamados a ser las piezas claves de este tercer encuentro. El corazón cuenta ahora más que el físico en un momento para la historia, que puede llevar al Viña Albali Valdepeñas a volver a luchar en una final por la liga, esta vez con el Barça como rival. Y a lanzarlo, a la vez, a Europa, a la máxima competición continental del fútbol sala, algo que nadie por Valdepeñas podría imaginarse.
«Tenemos que sacar fuerzas donde no las haya, lo importante será manejar los tiempos del partido. Entender el partido que nos toque jugar con la gente que tengamos. Si lo hacemos, vamos a tener nuestras posibilidades y nuestra opción de ganar allí y de meternos en la final». Son de nuevo las palabras de David Ramos, que apunta a la motivación, concentración, esfuerzo, solidaridad y trabajo. Las claves de un triunfo ante el Levante que tendrá un premio gordo e histórico. Y todos seguiríamos soñando unos días más.
