Continuando con las colaboraciones en torno al siglo y medio de existencia desde la inauguración de la plaza de toros de Valdepeñas, en este penúltima y cuarta entrega, nos vamos a referir a diversas circunstancias acaecidas, pero, sobre todo, nos vamos a centrar en aquellos festivales denominados “Operación Vino”, que contribuyeron a la construcción de los edificios de pisos que hay en la Salida del Peral, que fueron habitados por familias con necesidades, y comentaremos los festejos menores, sobre todo, aquellas dos temporadas de espectáculos nocturnos, principalmente novilladas.
No obstante comencemos con la importancia que siempre han tenido las peñas taurinas en Valdepeñas, aunque no hayan sido muchas, pero las dos actuales se encuentran consolidadas. Además, la peña taurina “El Burladero”, ya ha comenzado con la celebración de algunos actos conmemorativos de esos 150 años de la historia de la plaza de toros.
El desaparecido aficionado, Rafael Garrido García, ya dejó reflejado en su libro sobre “Historia de los toros en Valdepeñas”, que en la década de los cuarenta y cincuenta, funcionó la peña taurina “Juanito Bienvenida”, que finalmente desapareció.
Muchos años más tarde tomó el relevo la actual decana, es decir, la peña taurina “El Burladero”, que funde sus orígenes en la década de los años ochenta (en 1984 tuvo lugar el acto inaugural), siendo su primer presidente, Juan José Maroto Camacho, teniendo como presidente de honor al mítico diestro Andrés Vázquez. Hoy día, afortunadamente continúa su trayectoria, teniendo su sede en unas dependencias situadas frente a la plaza de toros.
Por su parte, en julio de 1997, el Club Taurino “Ciudad del Vino” inauguró su sede, en la calle Travesía Pocico, siendo su primer presidente Francisco Toledo Menchén. Actualmente la sede la tienen en las dependencias de la plaza de toros de Valdepeñas.
Festivales
Al inicio de los años sesenta del pasado siglo, Radio Juventud de Valdepeñas organizó diversos festivales denominados “Operación Vino”, que aparte de los prestigiosos espadas y rejoneadores que hicieron el paseíllo, estos festivales contaron con la colaboración de artistas como Elena Espejo, Manolo Morán, José Isbert, Laura Granados, Ángela Tamayo, María Luisa Merlo, Rosita Yarza, José María Seone, Ana Esmeralda y Venancio Muro, entre otros, siendo presentados a todo el público asistente que llenaba los tendidos de la plaza de toros.
Hubo otros festivales de este tipo, pero no podemos entrar en detalle en cada uno de ellos.
Sí recuerdo perfectamente la buena respuesta de los espectáculos cómicos taurinos, como también las novilladas nocturnas a mediados de la década de los años setenta del pasado siglo, siendo empresario el almagreño Manuel Rodríguez Maestre, con el precio de la entrada muy asequible, y que en algunos de ellos se sorteaba al final un Seat 133 y una moto Ducatti.
La afición respondía muy bien, el alumbrado era correcto y la gente se iba al tendido de la plaza porque a esas horas ya corría el fresco y, como es natural, no faltaba la cena, pues verdaderamente comenzaban algo tarde. Casi siempre eran los sábados por la noche.
En otros tiempos no faltaban festivales, bien benéficos para alguna causa concreta, o también los que organizó el C.D. Valdepeñas, o los conmemorativos del 6 de junio de 1808, y siempre con buena respuesta de la afición, pero ya digo, eran otros tiempos.
