Su secretario, Gregorio Gómez, ha hecho un repaso junto a Lanza de todos estos años.
Ha recordado que los fundadores de la peña fueron su padre, Tomás Gómez, y Miguel Cuartero, “y me fueron metiendo a mí poco a poco. Ahora me encargo de coordinar todo esto”. “Comenzamos siendo una murga, sacando unas coplillas a la calle sin pretensión de obtener ningún premio, solo de pasarlo bien. Hacíamos los disfraces en un fin de semana y dedicábamos un mes a ensayar las coplillas. Nos disfrazamos de segadores y de sastres. Ya el tercer año se nos ocurrió ir de la redacción de un periódico antiguo y nos llamaron para hacer el pregón de Carnaval de Ciudad Real gracias al periodista Emilio Romero. Nos íbamos a llamar “Desastre”, por el traje de sastres, pero al llamarnos de Ciudad Real, decidimos llamarnos “Redacción Marchosa” en alusión al disfraz de la redacción de un periódico”.
A partir de ahí fueron trabajando más en los disfraces “y dejamos el tema de las coplillas, porque no cantábamos muy bien. En 1988 fuimos de indios y vaqueros, como las figuras que se vendían a una peseta entonces. Aunque había peñas más grandes, obtuvimos el primer premio en Ciudad Real. A partir de ahí fue nuestro apogeo y luego los años 1992, 1993 y 1994 fueron flojos”.
Comenzaron siendo 12-15 personas y, en sus mejores años, 1998-1999, llegaron a estar cerca de 50 personas realizando los soldados de Toy Story. En 1999 hicieron el disfraz de “Los dioses del Olimpo”, simulando estatuas de piedra y con “una música espectacular”.
En 2000 hicieron un montaje llevando un disfraz cada uno que mostraba dos personajes que bailaban, y en 2001 se disfrazaron de “Encantados” con una serpiente que salía de una cesta.
A partir de ahí, vieron que era complicado hacer trajes todos los años, y decidieron hacerlos cada dos años, haciendo dos rutas (una por año) para participar en los concursos de Carnaval de las diferentes localidades de la provincia, la región e incluso Madrid, y obtenido varios premios, como el Arlequín de Oro de Ciudad Real o premios en Madrid como uno de un millón de pesetas.
“Hemos hecho grandes inversiones y se compensaban con los premios”, señala.
Los siguientes años se disfrazaron de juguetes de hojalata y de marionetas de madera pendientes de un hilo.
“Nuestras ideas no son de baile, sino de ofrecer espectáculo en la calle. Tardábamos un mes y medio o dos meses en prepararlas. Nuestras ideas son diferentes a lo que se suele ver en Carnaval”.
Gregorio Gómez recuerda especialmente y emocionado el año 2009. “Murió mi padre a finales de enero, pero decidimos salir en Carnaval”.
Los siguientes disfraces fueron de material reciclado para lanzar el mensaje de que hay que cuidar el planeta (2010-2011), de relojes de carrillón (2012-2013), de dinosaurios (2014-2015) y de bebés en cochecitos antiguos y sus mamás con zancos (2016-1017).
“A partir de ahí comenzó un poco el declive de la peña. Coincidieron varios factores, entre ellos, la COVID y que el ayuntamiento exigía mucho papeleo para desfilar. El coste de seguro era de más de 300 euros y la subvención por participar era de 250 euros. Gastábamos más dinero. En 2019, 2020 y 2021 no salimos y en 2022 hicimos una alegoría a la COVID”.
Infarto en pleno desfile
En 2023 hicieron una romería de devotos y devotas, yendo muchos de ellos con un disfraz de una persona montando a caballo. Pero se retiraron nada más comenzar a desfilar porque Gregorio sufrió un infarto y tuvieron que reanimarle en pleno desfile.
Agradece que se recuperó muy rápido. “Ya estoy bien de salud. No me lo creo. Lo que me pasó fue gordo. Lo veía todo rojo. Ahora estoy muy bien. La gente que ha tenido un infarto me ha dicho que le costó recuperarse. Yo desperté como reseteado. Me ingresaron un martes y desperté un viernes. Me costó un mes recuperarme del todo, pero estoy bien. Mi vida ha cambiado mucho en cuanto a alimentación, a cuidarme, a moverme más…”.
Como no desfilaron ese año, en 2024 lo hicieron con ese disfraz. “Sin pretensiones. Me lo pasé muy bien y me hicieron una sorpresa en el lugar que sucedió todo, en la avenida Gregorio Prieto, junto al molino, con la banda y la charanga en las que estoy”.
La peña llega a este 2025 haciendo una celebración por sus 40 años. “Hemos montado una exposición con las mejores fotos de estos años. Decidimos ir disfrazados de la redacción de periódico que nos dio nombre en 1987, con viseras, manguitos por la tinta… Hemos preparado cuatro pasos tontos y bailaremos, pero para divertirnos. Tenemos un mensaje al desfilar y un narrador invitará a divertirse. Este año será el primero que nos presentaremos al concurso como Carroza con Comparsa en lugar de a la categoría de Comparsa sin Carroza. Llevamos tres carrozas”.
Pregón de Carnaval
Como redactores de este singular periódico van también a dar el pregón de Carnaval este sábado en el Auditorio “Francisco Nieva”, antes de la gala Drag Queen. Harán un repaso de estos 40 años con algunos versos, cantando sobre tradiciones y valores manchegos, con un pasodoble y en plan chirigota con guitarra, cajón y voces.
En 2009 también fueron los pregoneros del Carnaval en Valdepeñas y repasaron la actualidad de la localidad, interpretaron música…
En esta ocasión, Gregorio ha adelantado que invitarán a los ciudadanos a participar en los Carnavales de la ciudad y de la región. “Que la gente salga a participar. Diremos: amigo, amiga, ponte el disfraz”.
Documental
Por otra parte, indica que “mi hijo ha preparado un documental de la peña en estos 40 años y se va a proyectar en algún lugar público, como el Centro Cultural “La Confianza”, con entrevistas de los componentes de la peña y gente que ya no está en ella. La idea sería proyectarlo el Domingo de Piñata o ese sábado en un acto abierto al público, pero, si no puede ser, pues más adelante. También queremos que la exposición ambulante que vamos a hacer se exponga en algún lugar”.
El futuro
En cuanto al futuro de la actividad de la peña en Carnaval, Gregorio lo ve incierto. “Tengo 68 años y la mayoría de los integrantes de la peña superan los 60. Otros son más jóvenes. Cada uno tiene sus ocupaciones. Cada vez cuesta más preparar todo para el Carnaval. Yo quiero pasar a un segundo plano y no preparar tantas cosas, por lo que necesitaría que más personas se involucrasen”.
Su hermana, Nati, modista, era la que se encargaba de hacer los disfraces más complicados, pero dejó de coser. “Van cayendo eslabones de la cadena”. Y ya no viajan tanto a otras localidades.
Le gustaría que “Redacción Marchosa” pudiera seguir con su actividad en Carnaval, pero si la gente se involucra más.
Ha dicho que tienen una idea muy buena, que no ha podido llevarse a cabo este año porque no han tenido tiempo. Quizás pueda hacerse otro año.
Ha asegurado que la peña seguirá adelante, con o sin su actividad de Carnaval. Lleva a cabo otras actividades durante el año, como organizar juegos en las Fiestas de la Vendimia y el Vino, salir en la cabalgata de Reyes, tiene una charanga… “Pero eso no lleva tanto tiempo como el Carnaval”. “La peña tiene cuerda para rato”.
Al principio no estaban registrados como asociación, ahora sí y cuentan con más de 25 personas.
Gregorio ha comentado que antes había más peñas de Carnaval en Valdepeñas y que la mayoría han desaparecido. “Había cinco o seis. También hablamos de ellas en el documental”.
Ve muy positivo que haya surgido una comparsa de Carnaval en Valdepeñas este año, “Los justos y más”. “Me alegra. Recuerdo cuando nuestra peña nació”.
Indica que “hemos vivido momentos con luces y sombras estos años, momentos muy buenos y momentos malos. En los primeros momentos no íbamos ni a las entregas de premios, porque no teníamos pretensión de obtener ningún premio. Íbamos a divertirnos. Con el traje de segadores nos fuimos a tomar algo al bar y nos llamaron diciendo que obtuvimos el tercer premio y salimos corriendo”.
Aboga por mantener ese espíritu de pasarlo bien y destaca lo bien que se llevan todos los integrantes de la peña, contando con varias familias.
