A las 20:30h de la tarde salía por el pórtico de la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, la Antigua, Venerable y Pontificia Hermandad del Santo Sepulcro y Nuestra Señora de la Soledad para realizar su Estación de Penitencia.
Abriendo el cortejo iba la figura del muñidor con toques de campana cada ciertos segundos en señal de luto por la muerte de Nuestro Señor Jesucristo acompañado de un acolito que portaba un farol.
Durante todo el recorrido se pudo observar, ante unas calles totalmente abarrotadas de gente, el respetuoso silencio que se adueñaba del recorrido procesional y el cual solamente fue roto por las marchas fúnebres que interpretaba la Agrupación Musical Maestro Ibáñez intercalando golpes de tambor seco.
Largas filas de penitentes con túnica negra y capa blanca portaban achón de cera natural blanca creando un ambiente de luto y tristeza ante los cuatro pasos que componen dicha Hermandad: Cristo de Limpias, Tríptico del Descendimiento, Santo Sepulcro y Nuestra Señora de la Soledad.
El Santo Sepulcro, desde hace ya varios años, es llevado a costal con un andar bastante significativo y serio que hace de él un paso solemne. Por su parte, el Cristo de Limpias salió totalmente restaurado, pues meses atrás estuvo en Sevilla en los talleres de Luis Fernando Ramírez Mata.
Procesión oficial
La procesión del Santo Entierro es la procesión oficial de la Semana Santa de Valdepeñas, por ello, pudimos ver como las Juntas de Gobiernos de las demás Hermandades y Cofradías de Semana Santa acompañaban con sus respectivas túnicas, al igual que haría la Junta de Gobierno de la Agrupación de Hermandades y Cofradías Semana Santa, toda la corporación municipal y cuerpos de seguridad (policía, protección civil, etc)
Ante la amenaza de lluvia que existía en mitad del recorrido, la Junta de Gobierno de la Hermandad decidió acortar dicho recorrido con el fin de ganar tiempo antes de que la lluvia empezara a caer.
En torno a las 23:00h llegaba la procesión a la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora con un paso un tanto más ligero debido a que la lluvia empezó a hacer acto de presencia.