La Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) Aceite de Oliva Campo de Montiel ha expresado mediante un comunicado de prensa su firme rechazo a la propuesta de llevar a cabo tareas de exploración y apertura de una mina de tierras raras en la provincia de Ciudad Real, “dado que esta iniciativa representa una seria amenaza para la industria del aceite de oliva y el prestigio de nuestro sello de calidad”, como indica su presidente, José María Arcos en el comunicado.
Por este motivo, la entidad olivarera insta a la Consejería de Desarrollo Sostenible y al propio Gobierno regional a desestimar el proyecto de investigación “Neodimio” de Quantum Minería y cualquier otro plan futuro, “dado que la apertura de una explotación de estas características podría afectar sin remedio a la imagen de nuestro producto, generando desconfianza en los consumidores y perjudicando nuestras ventas”.
José María Arcos continúa diciendo que “la industria del aceite de oliva en nuestra provincia es un pilar fundamental de su economía del que dependen miles de puestos de trabajo directos e indirectos, los mismos que pondría en riesgo la apertura de proyectos de tierras raras, afectando negativamente al empleo y bienestar de muchas familias”.
Recuerda así mismo que la provincia de Ciudad Real, con una producción de alta calidad, estimada en 43.000 toneladas de aceite de oliva, representa el 50% del volumen a nivel regional de Castilla-La Mancha (86.000), y que este dato es por sí lo suficientemente representativo para que las autoridades puedan valorar qué es lo que está en juego.
Por otra parte, apunta que esta actividad minera, “que implica remoción y procesado de un mineral de tierras raras con elementos radioactivos como el torio y el uranio durante su fase de explotación, es sabido que conlleva riesgos significativos para la salud humana y el entorno natural, como así demuestran múltiples estudios científicos internacionales, poniendo asimismo en peligro la biodiversidad de la región”, según señala.
“Queremos un futuro para Ciudad Real y sus habitantes, pero no este. Por ello, instamos a las autoridades competentes a considerar los impactos negativos
de la minería de tierras raras y a velar por la preservación de nuestra industria, que es esencial para miles de familias en la provincia”.
“Es responsabilidad de los Gobiernos proteger a la población y las actividades económicas tradicionales que desde tiempos inmemoriales sustentan a la comunidad. Por eso su prioridad debe ser preservar nuestro entorno, nuestra salud y nuestro futuro, razón por la que exigimos que se priorice el interés general frente a actividades que ponen en riesgo nuestro patrimonio más querido y, en último término, lo que en definitiva somos”, finaliza el comunicado.
El proyecto de tierras raras afectaría principalmente a las localidades de Valdepeñas, Santa Cruz de Mudela y Torrenueva.