Los alumnos de cuarto de primaria del Colegio El Mayol de Toledo han vivido una experiencia única en la excursión “Pequeños Exploradores, Grandes Cooperativistas: Aventura en Bodegas El Progreso”, impulsada por Solagro, ejerciendo su liderazgo como organización multi profesional de Ingeniería y canal de innovación alimentaria de Castilla-La Mancha. La actividad ha buscado introducir a los más jóvenes en los valores del cooperativismo y la importancia del consumo de productos locales, a través de una inmersión en el corazón de una cooperativa agroalimentaria. En esta línea de interés, Solagro está asimismo impulsando el desarrollo de canal DICA, plataforma de networking e innovación alimentaria que pretende promover entre otras la difusión de innovación entre industria y proveedores y acciones que fomenten el consumo de producto local y cooperativo.
Durante la visita, Jesús Julián Casanova, presidente de bodegas El Progreso trasladó a los alumnos del Mayol los valores cooperativos y los estudiantes conocieron de cerca el proceso de elaboración del aceite de oliva, guiados por el equipo de la histórica cooperativa de Villarrubia de los Ojos. Además de aprender sobre los pasos que convierten las aceitunas en uno de los productos más emblemáticos de la región, los jóvenes exploradores participaron en una cata adaptada de mano de los técnicos del Progreso y tuvieron la oportunidad de conocer el impacto de prácticas sostenibles en el sector agroalimentario.
A través de actividades didácticas y una charla adaptada especialmente para los niños sobre innovación e ingeniería en el desarrollo de inversiones en cooperativas, ofrecida por Ernesto Tardío, CEO de Solagro, los pequeños descubrieron de manera divertida y accesible los beneficios del trabajo en equipo, así como la importancia de la cooperación en el ámbito rural y agrícola. La presentación, diseñada pensando en su comprensión e intereses, capturó su atención y les permitió aprender mientras participaban activamente.
Con esta iniciativa, Bodegas El Progreso y Solagro pretenden inculcar en los estudiantes el valor de la colaboración, el respeto por el medio ambiente y la relevancia de los productos locales en la economía y cultura regional. Al acercar a las futuras generaciones al mundo del cooperativismo, ambos organizadores promovieron una educación en valores en el marco de la responsabilidad social corporativa que respalde la sostenibilidad y la innovación tecnológica en Castilla-La Mancha, inspirando a los jóvenes a valorar el trabajo conjunto en beneficio de su comunidad.
