Mirada baja bajo el peso de la cruz que lleva a cuestas, el Nazareno con su túnica de sarga morada y sobre un monte de claveles rojos ha salido de la Puerta del Sol de la parroquia San Pedro puntual a su cita de la madrugada del Viernes Santo de Ciudad Real, después de que el año pasado no pudiera realizar su estación de penitencia a causa del tiempo. En esta ocasión ha sido posible, en el año que esta hermandad, la Antigua y Venerable Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima del Amparo en su Gracia y Esperanza, cumple su tercer centenario fundacional.
En una noche menos fría que las anteriores el silencio ha invadido el ambiente marcado por el paso de la cuadrilla de 70 hermanos que han deslizado a Nuestro Padre Jesús Nazareno, obra del imaginero sevillano Antonio Illanes Rodríguez, por las calles de la capital a las órdenes de José María Pastor Muñoz, que este año ha debutado al frente del martillo de la Hermandad.

Una invitación a la oración
Poco después de un salida emocionante por lo estrecho de la puerta del templo y en el que la cuadrilla que porta el paso a costal ha demostrado su precisión en los movimientos, el canto de un miserere rompe el silencio de la noche. Una invitación a la oración interpretada por su propia coral que lleva cuarenta años haciendo penitencia junto al Nazareno.
Unos cantos que se realizan varias veces durante su estación de penitencia por sus 17 integrantes que cantan a cuatro voces (dos masculinas y dos femeninas). Momento destacado es también el que se vive todos los años en la Plaza de Santiago, donde las Hermanas de la Cruz entonan el canto tradicional ‘Sube el Nazareno’.
Cirios morados y faroles de latón alumbran el paso del Nazareno
Los hermanos que acompañan al Nazareno llevan túnica de terciopelo morado con botonadura de latón dorado, con escapulario y capillo blanco de tergal. Fajín blanco también de tergal y en el
centro del mismo, sobre óvalo de terciopelo morado, la medalla de la Hermandad completan el atuendo. Guantes blancos cubren las manos que sujetan cirios morados o faroles de latón con crestería y rematados con una cruz que alumbran el recorrido.

Entre las novedades de este año están la incorporación de 8 obras que se pueden observar en los canastos laterales del paso realizadas por el artista sevillano José María Leal. En concreto, se trata de los bustos de los apóstoles Felipe, Bartolomé, Tomás, Santiago el Menor y Judas Tadeo y los evangelistas Lucas y Marcos, junto al del Papa Francisco. También ha estrenado la fase de dorado de la canastilla, obra de Manuel Verdugo, así como un nuevo juego de palermos para los Diputados de Tramo.

Esta es la segunda ocasión que el Nazareno procesiona por las calles de Ciudad Real, la primera fue en el Domingo de Pasión (domingo anterior al de Ramos), esta vez como desde hace una década con el acompañamiento musical de la Agrupación Nuestro Padre Jesús de la Pasión de Linares (Jaén) que estrenó en Ciudad Real su última marcha propia para la Semana Santa 2025, dedicada a Nuestro Padre Jesús Nazareno de Ciudad Real, en el 300 aniversario de la fundación de la Hermandad. Bajo el título ‘𝐋𝐚 𝐏𝐚𝐬𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞𝐥 𝐍𝐚𝐳𝐚𝐫𝐞𝐧𝐨’ se trata de una marcha compuesta por el músico sevillano José Manuel Mena Hervás.