Cuando los años barbean tablas es habitual echar la vista atrás para recordar (una especie de volver a vivir lo recordado), y entresacar lo que, en sentido positivo o en el contrario, nos ha dejado huella especialmente duradera en la memoria. Y a ello nos encaminamos con el texto y fotografías que tienen en sus manos los lectores del semanario de Lanza, en el que la Tauromaquia sigue ocupando su espacio en papel, además del digital dedicado en la sección Toros de lanzadigital.com.
En clave provincial diremos que Ciudad Real ha vivido una temporada en la que los festejos no han abundado en la misma proporción que lo hicieron en tiempos de sobredimensionada bonanza (mediados de los 90 y de la pasada década). La ausencia de festejo taurino más dolorosa ha sido, sin duda, la de Puertollano, localidad de gran tradición, pegada a Almodóvar del Campo, donde en 2019 no se han celebrado toros. Al parecer problemas de coincidencia de fechas con conciertos lo impidieron. Sea por el motivo que fuere, da auténtica tristeza ver la mejor plaza de la provincia (arquitectónicamente hablando) sin actividad. Ojalá en 2020 los toros vuelvan a la plaza de la ciudad minera. Pero no se duerman; para ello hay que ponerse a trabajar ya.
La temporada echó a andar el 31 de marzo con un tentadero benéfico celebrado en Almodóvar del Campo, el cual, por cierto, volverá a celebrarse en 2020. La corrida –también benéfica- de Tomelloso, ya en abril, contó con un muy interesante encierro de El Ventorrillo –uno de cuyos toros resultó premiado con la vuelta al ruedo, aunque hubo otro mejor aún que correspondió a David Mora-, en la que triunfó un Aníbal Ruiz que en 2019 volvió a enfundarse el chispeante.
Carrión acogió una corrida de cuatro toros de Garzón que resultó muy decepcionante en su juego, estrellándose contra ella –a pesar de salir en hombros- Víctor Puerto y Aníbal Ruiz. El 11 de mayo la ganadería ciudarrealeña de Víctor y Marín echó una gran novillada de utreros en Corral de Calatrava, con triunfo de Carlos Aranda, quien ya empezaba a apuntar que el 2019 no iba a ser un año cualquiera para él.
El precioso coso del santuario de Las Virtudes, en Santa Cruz de Mudela, abrió sus puertas para albergar una corrida de toros, con algunos ejemplares muy interesantes de la vacada francesa de Tardieu.
Ya en el mes de julio, Manzanares volvió a encabezar la relevancia de los festejos celebrados, con una descastada y manejable corrida de Las Monjas frente a la que la terna, compuesta por El Fandi, López Simón y Ginés Marín, salió a hombros, junto al mayoral, en un cierre de festejo cercano a lo esperpéntico por lo desmesurado del premio para la ganadería. La Solana fue escenario de una buena novillada de Nazario Ibáñez en la que, una tarde más, destacó la dimensión ofrecida por Carlos Aranda. El Fandi triunfó en Almadén a finales de julio y El Cid cuajó a un toro de Mollalta de vuelta al ruedo en Porzuna el 29 de ese mismo mes.
Ya en el mes de agosto se conoció que –por fin- las puertas de Las Ventas se abrirían para el debut del daimieleño Carlos Aranda en la plaza más determinante del orbe taurino. La ocasión se produjo el 11 de agosto, y Carlos cortó una valiosa oreja a un novillo de La Guadamilla. Antes, el 5 de agosto, El Dani tomó una muy descafeinada –casi anecdótica- alternativa en Pedro Muñoz de manos de Canales Rivera y Julio Benítez “El Cordobés”. Y el día 10 Socuéllamos presenció una faena repleta de suavidad y clase de Finito de Córdoba, otra entonada actuación de Paco Ureña, y un nuevo éxito del torero de Tomelloso Antonio Linares, que cuenta sus paseíllos por salidas a hombros.
Ciudad Real
La Feria de la Virgen del Prado de Ciudad Real contó este año con cuatro festejos, uno más de lo habitual, debido a la falta de permiso político para celebrar una corrida meses antes de feria. Sin embargo lo que más pesó en el abono fue la baja de Roca Rey, cubierta con dignidad por Cayetano en la corrida estrella en la que El Juli, Manzanares y el menor de los Rivera Ordóñez despacharon una desigual corrida de Daniel Ruiz en la que hubo dos toros de gran nota, que cupieron en suerte a Juli y Manzanares. La corrida de rejones sirvió para que Ana Rita tomara la alternativa sin gran brillo, Aníbal Ruiz volvió a dar la cara en Ciudad Real al lado de un muy desdibujado, casi abúlico, Sebastián Castella, y un entonado Daniel Luque, frente a toros de Torreherberos. El abono finalizó con una corrida de Las Monjas en el que la campanada la dio Juan Leal, que sustituía a David Galván. Cabe señalar que, por segundo año, se celebró una exitosa jornada de toreo de salón para niños- y no tan niños- en el ruedo de la plaza de toros de la capital manchega, en la mañana del domingo 18 de agosto, y que el Ateneo Taurino Manchego siguió organizando, con gran asistencia de público, sus tertulias taurinas en el hotel NH.
Almagro celebró en su tradicional fecha del 25 de agosto un festejo de brillantez desigual –igual que la presencia de los toros de Capea lidiados- con actuación destacada en tono menor de Miguel Ángel Perera y Hermoso de Mendoza. Tomelloso fue escenario del debut como matador de toros de Antonio Linares en su plaza, con un balance de salida a hombros en solitario habiendo sido acompañado en el paseíllo por Morante y Cayetano, frente a un encierro de Virgen María, con un toro de vuelta al ruedo. El día 30, tristemente, fallecía el gran aficionado e historiador taurino Manuel Hervás. Y el 31 Antonio Puerta, que reaparecía, salía a hombros con un buen lote de Las Monjas en Puebla de don Rodrigo.
Los festejos se sucedieron con mayor prodigalidad en septiembre. El día 2 la lluvia hizo que tan solo saltaran al ruedo de Daimiel dos toros y un novillo, dejándonos con dos palmos de narices por la ilusión de ver a uno de los toreros más interesantes del escalafón actual, como es Emilio de Justo, junto a El Cid en trance de despedida, y el local Carlos Aranda. Esaú Fernández y Gómez del Pilar se repartieron seis orejas en Valdepeñas, Morenito de Aranda se llevó la tarde en Alcázar de San Juan, a mediados de mes las corridas de Piedrabuena y Bolaños se suspendieron por lluvia, impidiéndonos ver, entre otros, a Antonio Linares, y se cerró año taurino en Almodóvar del Campo, con una inspirada faena de Paco Ureña y el compromiso de Carlos Aranda con una deslucida novillada de Villamarta.
En lo que respecta a las escuelas taurinas, alumnos de la de Alcázar de San Juan han triunfado en varios certámenes, consiguiendo la adjudicación de un aula taurina propia en su plaza de toros hace escasas fechas.
Clave nacional
En clave nacional hubo varios nombres propios, empezando en Sevilla por los de El Juli (en Lanzadigital.com/toros publicamos un reportaje con él en casa de Daniel Ruiz apenas cuatro días después de salir por la Puerta del Príncipe), Roca Rey y, sobre todo, Pablo Aguado, quien cortó cuatro orejas y abrió las ventanas al aire puro del clasicismo para airear un escalafón muy poderoso aunque de muy limitada inspiración artística, propia y ajena. San Isidro, con el controvertido bombo, resultó un éxito, con triunfos de Paco Ureña (el torero del año para los acreditados premios Oreja de Oro de Radio Nacional de España), la interpretación sin complejos de un arrebatado Antonio Ferrera, que cortó tres orejas a la corrida de Zalduendo, al igual que la bravura de muchos buenos toros de bastantes ganaderías como la citada de Zalduendo o Juan Pedro Domecq, entre muchas otras. Roca Rey dejó media temporada huérfana de su gran tirón taquillero, y José Tomás volvió a reventar el toreo en su único paseíllo del año en Granada. Y apunten un nombre, como hicimos en Lanza con un reportaje sobre él en casa de Javier Gallego allá por el mes de abril: Juan Ortega.
Por supuesto, ocurrieron muchas más cosas, pero como huimos de lo tediosamente prolongado y no se trata de hacer una disección pormenorizada de la temporada –si quieren hacerlo no tienen más que repasar el histórico de noticias en lanzadigital.com/toros-, y además, nos lamentamos de que el sentido de la medida no sea algo que abunde actualmente, con faenas premiosamente dilatadas, con estas letras damos por terminado este somero repaso a lo que dio de sí la temporada taurina 2019. El año que viene más.