Senén Buitrago es un aficionado de Carrión de Calatrava. De los que no hacen ruido, pero están. Formó parte del Jurado de los Premios Taurinos de Casa Pepe, y sus opiniones siempre fueron mesuradas y equilibradas, extremos ambos que -dicen- es bueno practicar. Aquí tienen su Palabra de Aficionado.
¿Primer recuerdo taurino?
La verdad que no sabría citar uno en concreto, ya que desde muy niño siempre me llamó la atención el mundo taurino. Recuerdo el ver con mis abuelos las corridas de toros en televisión, de ser muy niño e ir a ver tentaderos en Víctor y Marín, de ir acompañando a mi padre (siendo muy pequeño) a las plazas de toros de la provincia. Rememoro la ilusión con la que vivía el día 30 de agosto cuando se celebra el encierro al estilo fernanduco, al cual no he faltado ningún año. Un recuerdo muy entrañable que tengo es cuando en alguna celebración familiar me “vestía de torero”, para hacer el paseíllo y dar unos cuantos pases de salón.
¿Primer impacto emocional taurino?
Pues un 30 de agosto, encierro en Fenancaballero, del año 1985. Este día se dio la desgracia de la muerte del Yiyo, en Colmenar Viejo, y recuerdo que la noticia corrió como la pólvora en el encierro. Con esta noticia me di cuenta de que cada vez que un torero se ponía delante de un toro lo que está en juego en su vida.
Otro impacto, este muy grato, fue cuando entré por primera vez a la plaza de toros de Las Ventas. Iba acompañando a mi padre y a Paco Cuerva. Fue un 26 de mayo de 1991; el cartel, Inclusero, Morenito de Malacay y Pedro Castillo, con toros de Saltillo.
Lo que más te gusta de la Tauromaquia/Toros.
Puff, me gustan tantas cosas… Ver los toros en el campo, un tentadero, una becerrada (con esa ilusión de los becerristas), el previo a una corrida de toros, el color en una plaza, el orden de un buen paseíllo, un puyazo en todo lo alto, una buena lidia a un toro con casta, los comentarios terminada la corrida, o una charla-coloquio con algún aficionado. Como se puede apreciar, hay pocas cosas que no me gusten de los Toros.
Lo que menos.
Los entresijos que se han creado en torno al toro. No soy partidario de que un empresario taurino sea a su vez ganadero y apoderado de un torero, monopolios que no son buenos para el mundo del toro. Un círculo en el que es difícil entrar, ya que casi siempre están los de siempre.
¿Cualquier tiempo pasado fue mejor?
Me gustaría decirte que no, pero me temo que sí. Echo de menos muchas cosas, como por ejemplo la variedad de encastes que antes había, toreros que se anunciaban con varias ganaderías a lo largo de la temporada y ahora esto es más complicado de ver. También se echa de menos la rivalidad que había entre toreros, algo que hoy día se convierte en noticia cuando se produce.
Y si entramos ya en el mundo de los “anti” esto ya es cosa aparte. Antes, a quien no le gustaban los toros, se limitaba a no asistir a ningún espectáculo taurino respetando a quien le gustaba. Sin embargo, en la actualidad, a quien no le gusta los toros se dedica a intentar prohibir y si, además, tienen algún tipo de autoridad (véase el reciente caso de la alcaldesa de Gijón) optan por prohibir directamente, intentando alegar cualquier ridículo motivo. La verdad es que me cuesta entender estas decisiones, sobre todo a los políticos que alardean de libertades, derechos para todos los ciudadanos,… ¿Y mi libertad de ir a los Toros? (Consejos vendo que para mí no tengo).
Estado de la afición a los toros.
Pues al hilo de la pregunta anterior, creo que los aficionados hemos estado de brazos cruzados mucho tiempo y en este lapso temporal los “anti” nos han “ganado”, siendo mucho más activos, con unas proclamas muy populistas y manejando las redes sociales antes que nosotros. Es cierto que desde hace unos años parece que hemos salido de ese letargo en el que estamos metidos y espero que no sea tarde. Los aficionados debemos reivindicar nuestra Fiesta, con argumentos sólidos (que los tenemos), sin entrar en polémicas, con la cabeza alta y sin prejuicios. Basta ya de tener que aguantar los insultos de unos “anti”, solo por el hecho de que nos gusten los Toros. Insultos infundados como insensibles, crueles, bárbaros, salvajes, ignorantes e incultos. ¿Acaso serían capaces de llamar insensibles a Goya, Picasso, Botero, Machado, Alberti, Mario Vargas Llosa, Albéniz, Orson Welles, Buñuel, Fernando Savater, Joaquín Sabina y un largo etcétera? Seguro que no, porque todos ellos, grandes figuras influyentes en sus respectivos campos, han sido o son gente dotada de una alta sensibilidad y cultura.
¿En qué pueden llevar razón quienes critican la Tauromaquia?
Considero que los que critican la Tauromaquia lo hacen desde el más absoluto desconocimiento, y que si se informaran más, es posible que su visión sobre este mundo fuera distinta. El espectáculo visto de forma fría, sin ningún conocimiento al respecto sobre este arte les puede resultar algo sangriento, y más cuando en ocasiones no se hace una buena lidia desde que sale el toro por toriles hasta su muerte. En este caso somos nosotros los que más en contra estamos de que se haga una mala lidia.
Aspectos a mejorar en el entramado taurino.
Como ya he comentado antes, no soy partidario de los monopolios en el mundo del toro. También me gustaría que se pudiera crear algún estamento u organismo que pudiera regular todo esto. Es cierto que existe un reglamento taurino pero no en todos los casos se cumple y, por supuesto, en el que estén representados todos los que de una forma u otra participan en este mundo (ganaderos, veterinarios, aficionados, toreros, etc. Y por último, se podría modificar el tamaño y forma de el castigo con puya y banderillas. Hay estudios que exponen que se podrían reducir estos (tamaño/forma de arpones y puya), sin perder su función.
¿Toro o torero?
Lo tengo clarísimo: el toro. Bajo mi punto de vista el protagonista debe ser el toro, y sin él nada de lo que estamos hablando sería posible. Es cierto que para que un toro muestre todo su potencial necesita a un torero (y cuadrilla) que nos muestre todo lo que el toro lleva dentro. Cuantas veces después de una corrida hemos comentado, “si este toro le hubiera tocado a tal torero” o “si al toro se le hubiera lidiado mejor”…
Mi torero
No me considero de ningún torero. Me gustan los toreros que paren, templen y manden, y que sea de arriba abajo y de dentro a fuera y cargando la suerte. Sé que no pido poco pero cuando veo torear de esta manera estoy tan metido en la faena que se me olvida todo (como si estuviera uno solo en la plaza) y es cuando se te empieza a erizar el bello y después de cada tanda te sale de dentro un ¡¡Olé!!
Mi ganadería
Me gustan las ganaderías que tengan cierto “picante”. No me gustan las ganaderías con toros “noblotes” que pasan por la muleta sin decirte nada. Por esto una ganadería que me gusta desde hace mucho tiempo, con sus altos y bajos, es la de Victorino Martín.
El último crack taurino.
Hoy por hoy, José Tomás. Considero que aún no ha salido otro torero que pueda llenar las plazas de toros como lo hacía él. Ojalá pronto salga otro que llene de nuevo las plazas de toros o que reaparezca de nuevo José Tomás.
Cartel ideal de plaza, toros y toreros.
Es complicado, pero si tuviera que decir algún cartel soñado: Monumental de las Ventas. Antoñete, Jose Mari Manzanares y Joselito, con toros de La Quinta
Un cartel ahora ideal: plaza de la Maestranza. Daniel Luque, Juan Ortega y Pablo Aguado, con toros de Victorino.
Recomendación de libro taurino.
La verdad es que no podría recomendar uno solo, pero se me antoja imprescindible citar el Cossio , la enciclopedia taurina. Un libro al que le tengo mucho cariño, ya que fue el primero que me leí, es el de “Antonio Bienvenida, recuerdo de un Torero” del autor Filiberto Mira. Y por supuesto recomendaría cualquiera de los relacionados con los toros en nuestra provincia como puede ser “La plazas de toros de la provincia de Ciudad Real” de Segundo Cavanillas Lora, “Ganaderías de Lidia de Ciudad Real” de Julio César Sánchez y, cómo no, “Ciudad Real, Historial Taurino” del gran Manuel Hervás Casado.