Una treintena de niños de entre 6 y 14 años han estimulado su creatividad artística a lo largo de este mes en un curso impartido por el pintor Jesús Arévalo para proyectar su capacidad inventiva y prácticar técnicas pictóricas.
Algunos son ‘viejos’ conocidos de la actividad que desarrolla el Ayuntamiento de Ciudad Real cada verano, y toda la clase expondrá sus obras en una muestra en el Museo López-Villaseñor, que ha sido sede del curso.
Esta mañana, el concejal de Promoción Económica, Cultural y Turística, José Luis Herrera, acompañado del director de los Museos Municipales, Francisco Javier López, ha clausurado la iniciativa y ha entregado los diplomas acreditativos a los niños en un acto en el que ha destacado sus talentos artísticos.
Herrera ha destacado “la buena aceptación” de las enseñanzas pictóricas a alumnos infantiles y también a adultos (han participado una veintena de personas) que ofrece el Consistorio. “El objetivo de la Concejalía no es sólo transformar y mostrar a la ciudadanía la calidad de nuestros artistas, sino ofrecer cursos para todos”.
El edil ha celebrado “la satisfacción” de los asistentes “con lo que han aprendido” en el curso al curso artístico, desarrollado entre el 3 y el 27 de julio como un espacio lúdico-didáctico, además de haber “compartido experiencias y adquirido conocimientos”.
También ha reconocido el trabajo de los técnicos municipales a la hora de desarrollar este tipo de actividades.
Por su parte, Arévalo ha destacado la “motivación” de los pequeños alumnos, que han mostrado “una evolución efectiva”, impulsada por sus enseñanzas sobre distintas técnicas.
En concreto, han trabajado, según ha dicho el docente a los medios, el claroscuro a través del dibujo y el volumen, además de la teoría del color desde los tonos más primarios.
Además de estas técnicas, el profesor y pintor ha introducido el arte abstracto, a través de la figura de Paul Jackson Pollock, y de la elaboración de composiciones “con muchas texturas”, por lo experimental del método, con el que los más pequeños incluso han cambiado el pincel por el tenedor.
Precisamente, el aprendizaje del buen uso de los materiales artísticos y su correcta aplicación en coordinación con la exploración personal era uno de los objetivos del curso.
Posteriormente, los adultos, que también expondrán sus obras, han recogido sus diplomas de la mano del edil de Cultura.